Marcelino Lupa y su esposa María Llacho fallecieron a los 86 años sin recibir la casa que el Estado les prometió reconstruir, luego que el terremoto del 2016 la destruyera. Hasta el año pasado, un módulo prefabricado fue el hogar de los ancianos en el distrito de Madrigal, en el Valle del Colca, la principal zona turística de Arequipa.
Ese sismo de 5,3 grados de aquel 14 de agosto dejó más de mil familias damnificadas, pero solo 906 fueron elegidas para recibir el Bono Familiar Habitacional (BFH) de hasta S/43 mil de Techo Propio. En ese grupo estaban los esposos Lupa Llacho. Según las especificaciones del subsidio, cada familia damnificada firmaba un contrato con una de las constructoras habilitadas para el plan de reconstrucción, que estaban debidamente registradas en el Ministerio de Vivienda.
El Fondo Mi Vivienda desembolsó S/40 millones a nombre 26 empresas, dinero que recibían a través de una entidad bancaria en función al avance de las obras. La reconstrucción no debió demorar más de 120 días luego de firmarse el contrato y tampoco debió representar costo alguno para los beneficiarios. Han pasado más de ochos años y decenas de familias siguen esperando que se culmine la construcción de sus viviendas.
En el Valle del Colca, El Comercio identificó a 13 familias que acusan a un grupo de empresas de abandonar la reconstrucción y al Estado de una mala gestión y fiscalización de los bonos de vivienda.
Perjudicados
En el caso de los esposos Lupa Llacho, la empresa LV Projects debió reconstruir su casa y entregarla en el 2020. Sin embargo, al momento de la visita realizada por este medio, la constructora solo había dejado un ambiente sin puertas, ventanas, ni servicios básicos. Faustino, hijo de los esposos, acusa a LV Projects por abandono de obra y exige al Gobierno que culmine la reconstrucción.
“Mis papás murieron con la esperanza de que iban a reconstruir la casa”, cuenta Faustino. LV Projects firmó contrato con la pareja fallecida el 27 octubre de 2020 y cuando este medio visitó la zona, la obra seguía abandonada. Así como esta pareja, algunos damnificados han alcanzado la tercera edad o incluso fallecieron sin recibir sus casas.
LV Projects firmó contratos con 42 familias de diferentes distritos del Colca para reconstruir sus casas, entre el 2020 y 2021. En total, el Ministerio de Vivienda le desembolsó casi S/2 millones para esta empresa, según reporte del Fondo Mi Vivienda al que tuvimos acceso. Pese a los pedidos de información, este ministerio no pudo acreditar que todas las viviendas fueron culminadas satisfactoriamente.
Sin llaves
No es el único caso en que LV Projects es acusada de abandono. En el distrito de Ichupampa, Mariela Saico Flores, de 32 años, dijo que la empresa no le ha dado las llaves de la puerta principal de su casa; por lo que, desde hace tres años, ingresa a través de una puerta alternativa. Además, la constructora dejó la casa de Saico Flores sin sanitarios ni las mayólicas en el baño. Según la damnificada tampoco la empresa le entregó algún documento de la culminación de las obras. Saico firmó contrato con LV Projects en el 2022, con un bono de S/26 mil.
Similar es el caso de Irma Ccama Infa, de 37 años, también en Ichupampa. Ella no ha recibido las llaves de su casa y tuvo que usar su propio dinero para arreglar los cables expuestos y las paredes sin tarrajear. “Nosotros hemos construido para vivir, no para que este de ahí de adorno”, dice Irma. En el 2022, LV Projects se comprometió a reconstruir la casa a cambio de S/26 mil 400.
LV Projects está domiciliada en Lima, a 976 kilómetros de Madrigal. El fundador es Luis Luna Victoria Flores. Este medio se comunicó a los teléfonos que consignan en su página web. Nos contestaron el celular y al identificarnos como prensa y querer comunicarnos con Luis Luna, nos colgaron y no respondieron más. Escribimos a sus correos electrónicos para obtener su versión, pero nunca nos respondieron.
Abandono en tres distritos
Una segunda empresa identificada es AC Insyde, que dejó inconclusa la vivienda de los esposos Hermenegildo García y Juliana Lupa, de 86 y 85 años, en el distrito de Madrigal. Su contrato lo firmaron en el 2018 y la constructora solo levantó los muros y el techo. “Dejaron todo el galpón sin ventanas, cables, puertas ni baño”, dice García.
Hace cuatro años no saben nada de AC Insyde. La pareja tuvo que vender su ganado para terminar de construir su casa, porque en el módulo temporal donde vivían el frío los afectaba mucho.
AC Insyde también estuvo a cargo de la reconstrucción del hogar de Benigno Checca y Gregoria Flores, en el distrito de Yanque. Sin embargo, los esposos murieron en el 2022, a los 89 años, sin ver la obra terminada. Según el contrato, la empresa debía acabar la casa en cuatro meses, pero la edificación permanece inconclusa es usada como almacén y el patio como depósito de cemento vencido.
Otra casa sin culminar por AC Insyde es la de Reynalda Mamani, de 55 años, en el distrito de Coporaque. Ella tiene una obra sin acabados y no cuenta con baño ni electricidad. Reynalda se prestó S/10 mil para culminar su hogar que comparte con siete personas.
Para los tres casos, AC Insyde firmó contrato en 2018 y se comprometió a acabar las obras a cambio de S/43 mil por cada hogar. El Ministerio de Vivienda explica que el registro de AC Insyde en la reconstrucción fue cancelado por incumplir con la normativa, aunque sin dar más detalles. Esta empresa fue fundada por el abogado César Li Riofrío y obtuvo 20 contratos por S/ 869 mil, en cuatro distritos; pero, pese a los pedidos de información, Vivienda no precisó cuánto se le ha depositado.
Endeudada con todo un distrito
Una tercera empresa es Inversiones Bavalu, que recibió más de S/2 millones para reconstruir 59 casas en Caylloma, incluida la casa de Teodoro Huaypuna y Justina Suyco, de 56 y 54 años, en el distrito de Yanque. La pareja firmó un contrato en 2017, pero la empresa ni siquiera inició la obra, aseguran. El proyecto contemplaba un bono de S/43 mil.
Los vecinos de Yanque además acusan a Bavalu de tener una deuda impaga por hospedaje, alimentación y compra de materiales. Incluso el mismo Huaypuna dice que la empresa gerenciada por Armando Barrón Flores le debe S/600 por las maderas que le alquiló.
“Nuestra ET no dejó viviendas abandonas ni a medio construir, se construyeron 48 viviendas habitables. Aclarando que por diversos motivos ocho viviendas no se construyeron, por lo cual, de acuerdo al procedimiento se procedió con la devolución de los bonos de manera íntegra” declaró a El Comercio el gerente de Inversiones Bavalu, Armando Barrón.
En el caso de Teodoro, el empresario no recuerda si firmó un contrato con el damnificado, además dijo que las deudas con negocios de la zona corresponderían a terceras personas que usaron el nombre de su empresa.
Responsabilidad
Consultados sobre las obras inconclusas, si bien el Ministerio de Vivienda financió los bonos, indicó, que la supervisión correspondió a las autoridades locales. Sin embargo, ante pedidos de información y entrevistas, la municipalidad provincial de Caylloma y las alcaldías distritales dijeron que no cuentan con documentos sobre las obras de reconstrucción.
Aunque son gestiones recientes, los alcaldes tampoco encontraron documentos de años anteriores sobre alguna fiscalización a las empresas constructoras.
“Con obras inconclusas hay unas 27 familias, pero donde no se ha movido una piedra, hay más de 100. No todos fueron beneficiados con los bonos. Nosotros en la municipalidad no tenemos ningún documento de sus contratos. En el 2016 vinieron las empresas al municipio solicitando el pago del autoevaluó de los damnificados. Pero no hay documentos de los contratos”, declaró el alcalde distrital de Madrigal, Mario Pacheco.
“Tengo conocimiento que a cinco ciudadanos no se les construyó sus viviendas. Incluso hay un beneficiario con denuncia policial por falsificación de sus firmas. Esa empresa (Bavalu) ha estafado a mucha gente, han cobrado y no han construido nada. Tampoco las gestiones anteriores nos dejaron los documentos de los beneficiarios. Igual exigimos al gobierno central que se haga responsable y termine esta reconstrucción”, señaló a este medio el alcalde de Yanque, José Sarayasi.