Una mujer en Los Ángeles camina con una mascarilla puesta. (Foto: Frederic J. BROWN / AFP)
Una mujer en Los Ángeles camina con una mascarilla puesta. (Foto: Frederic J. BROWN / AFP)
/ FREDERIC J. BROWN
Redacción EC
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En los últimos días los casos de se han incrementado en el mundo, mientras que en China cada día disminuyen más. Por ello, países como Italia han decidido aislar a ciudades enteras para contener el avance de la epidemia.

Estas medidas son parte de un concepto llamado “distanciamiento social”, que es usado por los epidemiólogos en este tipo de crisis para diseñar estrategias de contención.

El distanciamiento social es la separación física, voluntaria u obligatoria, entre individuos o grupos, con el objetivo de evitar el contagio. Incluye medidas que las propias personas deben hacer, como lavarse las manos y quedarse en casa si están enfermas hasta declarar cuarentenas en ciudades enteras.

Esta distancia evita la condición necesaria para que una persona transmita el virus a otra: la cercanía. El Covid-19 se transmite por las gotitas de saliva u otras secreciones de los infectados. Estas pueden viajar unos metros o permanecer sobre superficies.

Un estudio publicado en muestra lo efectiva que es la distancia social en el manejo de epidemias, como la del AH1N1 de 2009. El siguiente gráfico muestra la diferencia en el progreso de una epidemia cuando hay distancia social y cuando no:


La línea roja muestra la evolución normal de una epidemia si no se toma ninguna medida relacionada al distanciamiento social. La curva azul representa lo que podría suceder si la población la practica. La imagen muestra que los casos disminuyen considerablemente.

“Lo que ha sucedido en China muestra que la cuarentena, el distanciamiento social y el aislamiento de las poblaciones infectadas pueden contener la epidemia”, señala el estudio liderado por el Imperial College London.

Según el Payal Kohli, asesor médico de 9News, en EE.UU., al aplicar el distanciamiento social, “la vida útil [de la epidemia] es más larga, pero también menos severa”.

“Las personas deben entender que el distanciamiento social no es algo aterrador”, añade Kohli, quien afirma que las personas deben evitar reuniones masivas que puedan propagar aún más la enfermedad.

No solo deben aplicar estas medidas aquellos que tengan síntomas, sino todos. Esto quiere decir que todas las personas tienen control sobre la propagación del virus.

“Si una persona sana se distancia socialmente, es menos probable que contraiga el virus ... o lo transmita a una comunidad en riesgo”, detalla Kohli.

“En un año, tengo la esperanza de que volveremos a nuestras vidas como de costumbre”, finaliza el experto.

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