De acuerdo con unas pruebas realizadas por la NASA, Brazuca, el balón de fútbol diseñado para el Mundial 2014 es mejor para los jugadores que el usado en Sudáfrica 2010, el Jabulani.
Utilizando un túnel de viento, la agencia estadounidense determinó que la aerodinámica del balón usado en Brasil ofrece trayectorias más normales que las de la Jabulani, que recibió muchas críticas por los movimientos imprevisibles que realizaba.
El desarrollo de Brazuca tardó dos años y medio y su superficie no es lisa como la de su predecesora, sino que posee texturas. Esto evita que el flujo del aire pase sobre el cuero del balón, influyendo en su recorrido. Además está compuesta por seis paneles, y no por ocho, como la Jabulani, algo que beneficia su simetría, uniformidad y eficacia.