Conoce estas tradiciones para dar la bienvenida a los bebés

El nacimiento de un niño es una gran alegría para toda la familia. Lo llenan de regalos, de mimos y de atenciones todo el día y se preocupan de que no pase ninguna necesidad.

A todos estos cuidados físicos y afectivos, algunas culturas añaden sus propias tradiciones con las que buscan asegurar una vida plena a su nuevo integrante.

En Bali, los bebés son considerados seres divinos bajados del cielo y sus pies no pueden tocar el piso pues simboliza la impureza. A los 210 días de nacido los pies del niño son puestos en la tierra por primera vez durante la celebración de su primer otonan, una ceremonia donde la familia agradece a los dioses por las gracias recibidas y alejan los espíritus negativos.

Para asegurarle el mejor futuro a su bebé, los padres armenios realizan el Agra Hagid cuando al bebé le sale su primer diente. Este ritual consiste en colocar al niño rodeado de artículos que simbolicen profesiones. Al bebé se le deja escoger uno de los objetos el cual representa a lo que se dedicará cuando sea grande.

En Trinidad y Tobago los regalos van más allá de los pañales y las babitas. Cuando una persona llega a casa a visitar a un recién nacido, le debe colocar algo de dinero en la mano al bebé para atraer la prosperidad y las bendiciones a su vida.

Mientras que en nuestro país cuidamos que los bebés no estén expuestos al frío invierno, en lugares como Suiza y Dinamarca los padres hacen que sus niños duerman la siesta dentro de sus coches fuera de casa a temperaturas bajo cero. Ellos consideran que eso los ayudará a mejorar su sistema inmunológico y los acostumbrará al frío que llega a sus casas año a año.

En países donde la cultura maorí es predominante, como Nueva Zelanda, las madres tienen la costumbre de enterrar la placenta del bebé en la tierra de sus ancestros como una forma de mantenerlo atado a sus raíces. Luego, la familia planta un árbol o algún tipo de flor en el lugar para saber el lugar exacto de esa unión con la tierra.

En Brasil no solo los bebés reciben presentes sino también los visitantes. Las madres de recién nacidos deben preparar algún regalo para entregar a todas las personas que llegan a ver al nuevo integrante de la familia.

Hay culturas donde los bebés no reciben su nombre al momento del nacimiento sino en una gran fiesta días después. Es el caso de Egipto, donde al sétimo día de vida del niño se celebra el Sebooh. El ritual consiste en vestir al niño de blanco y colocarlo en un colador gigante para sacudirlo como una forma de acostumbrarlo a los malos ratos que pasará en la vida. Luego se lo echa en una manta sobre el suelo y la familia le deja obsequios como símbolo de abundancia.

En los países musulmanes, a los bebés se les afeita la cabeza luego del primer mes de nacidos. La cantidad de pelo que se obtiene es pesada y el equivalente en plata es donado a caridad. La creencia es que de esa forma el recién nacido es incluido en la sociedad practicando la caridad.