A pesar de haber ganado la temporada pasada la Champions League y tener hoy la chance de obtener su primer título de la temporada con la Supercopa de Europa ante el Sevilla, las aguas en el Real Madrid están bastante movidas.
Con la marcha de Diego López al Milan parecía que se solucionaba el problema del arco del conjunto blanco y también el del vestuario, sin embargo, al parecer no es el único que existía, y en el que el arquero Iker Casillas también es protagonista.
Según el diario Mundo Deportivo, la relación entre Casillas y Sergio Ramos no pasa por un buen momento y en los últimos meses se habría deteriorado.
El origen se habría producido en la etapa final de José Mourinho como técnico de los blancos. Casillas y Ramos, como los capitanes del equipo español, fueron los que hablaron con el entrenador luso sobre su actitud polémica en los campos de fútbol. Sin embargo, en los últimos meses del portugués en el banco del Madrid, el defensor andaluz moderó su crítica hacia Mourinho mientras que el portero de 33 años siguió con sus discrepancias.
Con la llegada de Carlo Ancelotti, la relación entre ambos futbolistas fue de respeto profesional y buena educación. Pero tras la caída ante el Barcelona en el Santiago Bernabéu, Ramos y Casillas discutieron por la postura pública que el club merenge debía tomar con respecto a la actuación del árbitro en el clásico. El arquero prefería no hacer comentarios, sin embargo, el defensor de 28 años, expulsado en aquel partido, salió a los medios a criticar al juez.
Nuevo conflicto tras ganar la 'Décima'
La alegría por conseguir la décima Champions League ante el Atlético de Madrid quedó relegada al momento de recibir la 'Orejona'. Ramos le pidió a Casillas, primer capitán del Real Madrid, levantar juntos el trofeo pero el portero español decidió hacerlo solo y luego entregarle la copa al defensor.
Este gesto no le gustó a Ramos, quien en el palco del Estadio da Luz de Lisboa intentó levantar el trofeo con Casillas pero el arquero se adelantó y celebró en solitario. Asimismo, el viaje a Brasil para el Mundial con la selección española tampoco ayudó a mejorar la relación ya que la 'Furia roja' decepcionó y el portero fue uno de los más criticados.