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No solo es el Parque Leoncio Prado: ¿Qué otras áreas verdes de Miraflores están siendo intervenidas para instalar casetas de serenazgo?
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El enfrentamiento entre los vecinos y la Municipalidad de Miraflores no solo ocurre en el parque Leoncio Prado, donde se decidió instalar un complejo de monitoreo de seguridad. Esta situación ha generado indignación entre los residentes, pues se trata de un área verde intangible. Además, se ha alertado que lo mismo está sucediendo en otros parques, que vienen siendo intervenidos por el municipio.
Los vecinos denuncian que son cinco los parques que están “amenazados” por la intervención. Estas obras representan una vulneración al libre tránsito, así como a la preservación del medio ambiente y de los espacios de esparcimiento urbano. No se trata únicamente del parque Leoncio Prado, sino también del parque Francisco de Zela, el parque Clorinda Matto de Turner, el parque Tejada y la berma central de la cuadra 2 de la avenida Jorge Chávez, todos ubicados en Miraflores.
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Carlos Salas Abusada desglosa con rigor las noticias clave del día de lunes a viernes.

La situación derivó en un plantón donde se registraron enfrentamientos entre vecinos y autoridades, ya que las zonas se encuentran cercadas con rejas que impiden el ingreso. Los residentes advierten que en el parque Leoncio Prado las obras ya han comenzado y en los otros puntos superan la mitad de ejecución. Según el municipio, los módulos de seguridad ocupan entre 45 y 75 metros cuadrados.
Los vecinos recordaron que la Ordenanza 1852 de la Municipalidad Metropolitana de Lima dispone, en su artículo 6°, capítulo segundo, la intangibilidad de las áreas verdes de uso público gestionadas por las municipalidades.
Los residentes precisaron que sí han solicitado la instalación de módulos de seguridad ciudadana, pero exigen que se ubiquen en espacios que no afecten las áreas verdes.
Uno de los vecinos del parque Francisco de Zela, Fernando Sarmiento, declaró a El Comercio que en cuatro de los cinco puntos las construcciones ya superan el 60% de avance. “Mucha gente está en desacuerdo. Incluso, los vecinos de los cinco puntos hemos unido fuerzas y hemos recolectado 600 firmas en contra de este proyecto, además de una iniciativa en Change.org donde ya sumamos casi 1.000 adhesiones. La municipalidad quiere hacer creer que este es un capricho vecinal, pero no: es un capricho municipal. No se ha consultado de manera adecuada a los vecinos sobre esta iniciativa”, señaló.

Por otro lado, una de las vecinas de Miraflores que se opone a la instalación de la caseta en el parque Leoncio Prado, Claudia Pareja, comentó a El Comercio que la protesta de los vecinos se llevó a cabo de manera pacífica. “Nosotros no estamos ejerciendo ningún tipo de acto violento; son los serenos y policías quienes nos están amedrentando. Han colocado de manera prepotente una reja y no nos dejan pasar. Nos sentimos muy asustados, no se nos da la oportunidad de dialogar”, expresó.
Pareja también reveló a este diario que la Corte Superior de Justicia de Lima admitió la acción de amparo interpuesta por los vecinos contra la municipalidad y aseguró que estarán atentos a cualquier novedad del proceso legal para hacer valer sus derechos.
Análisis
En diálogo con El Comercio, Emilio Noguerol —abogado por la Universidad de Lima, especialista en derecho público económico y asociado del Estudio Amprimo, Flury, Barboza & Rodríguez Abogados— recordó que debe considerarse la Ley 31199 del 2021, Ley de Gestión y Protección de los Espacios Públicos, una normativa relativamente reciente. “Fue la primera ley que sistematizó el concepto del derecho a la ciudad”, precisó.
Noguerol advirtió que “resulta un despropósito intervenir áreas verdes, por más pequeñas que sean, para destinarlas a un servicio público que, aunque pueda ser importante, no justifica la reducción del área. Sobre todo porque los municipios cuentan con otros espacios que no son áreas verdes intangibles. Si se pretende destinar un área verde a una actividad que genere perjuicio o limite su disfrute, eso está prohibido”.

El especialista distinguió entre servicios accesorios o complementarios —como baños, gimnasios al aire libre o puestos de vigilancia dentro del parque— y la construcción de infraestructura más compleja. “La línea de interpretación es muy fina: debe tratarse de una mejora para el parque, no de una reducción de su espacio. Lo que la municipalidad debió hacer, y si lo hizo no fue de manera adecuada, es consultar a los vecinos si les incomodaba la instalación de ese centro en el parque. Creo que estamos frente a una mala gestión del entorno urbano, lo que genera un divorcio entre la ciudadanía y la administración municipal actual”, opinó.
“Al revisar el artículo 2 de la Ley de Espacios Públicos se encuentra la conexión entre seguridad ciudadana y defensa del espacio público. En este caso, mientras más transitados e iluminados estén los parques, más se contribuye a reducir la inseguridad. Por eso, resulta un doble despropósito: intentar mejorar la seguridad vulnerando al mismo tiempo el espacio público”, concluyó.
Por su parte, la especialista en derecho regulatorio municipal Laura Velásquez recordó que los parques son espacios de dominio público y de carácter intangible. “Así lo establece la Ley 31199, Ley de Gestión y Protección de los Espacios Públicos. La utilización de estas áreas para otro fin —incluso si se trata de un centro de monitoreo— resulta incompatible con la normativa”, explicó.
La abogada advirtió que las áreas verdes en Lima se han ido reduciendo con el tiempo, mientras que “poco a poco la ciudad se está llenando de cemento”. Si bien reconoció la necesidad de implementar medidas contra la inseguridad, subrayó que también es indispensable preservar los parques. “Por ello, deben evaluarse otros ambientes para ubicar estos módulos de control. De lo contrario, la entidad distrital corre el riesgo de enfrentar un procedimiento disciplinario una vez que cambie la gestión municipal”, enfatizó.
Vecinos de Miraflores protestan contra la instalación de módulos de seguridad en cinco áreas verdes del distrito, incluida el parque Leoncio Prado. Denuncian que las obras vulneran el libre tránsito y afectan la intangibilidad de los espacios públicos destinados al esparcimiento. pic.twitter.com/b4Dt6LQO35
— Sebastián Ramírez (@chinoperiodista) August 27, 2025
Descargos
La Municipalidad de Miraflores informó a El Comercio que estos trabajos se vienen realizando desde hace un tiempo. “La Subgerencia de Serenazgo ha reportado diversas acciones implementadas en la comunidad para enfrentar la inseguridad. Se anunció la instalación de módulos de seguridad para ampliar la cobertura y mejorar la distribución del personal. En total, son cinco centrales de monitoreo, 204 cámaras fijas, 200 bodycams, tres drones, entre otros equipos. La Gerencia de Participación Vecinal destaca, además, la colaboración entre la municipalidad y los vecinos”, señaló.
“La implementación no afectará grandes extensiones de áreas verdes. La iniciativa edil tiene como objetivo reforzar las labores de prevención y reducir los índices de delincuencia. La obra no dañará los jardines del parque. El municipio de Miraflores lamenta que un grupo de vecinos haya manifestado su interés en obstaculizar los trabajos. Estos módulos albergarán al personal de Serenazgo encargado de velar por el orden interno y la seguridad de la comunidad”, agregó.
“Los lugares destinados para la construcción de los módulos de seguridad ciudadana fueron definidos con el consentimiento de la mayoría de vecinos que residen en los alrededores”, remarcó el municipio.











