¿El Vraem como una región para buscar su desarrollo?

En julio del 2012 se oficializó la creación de la Comisión Multisectorial para la Pacificación y el Desarrollo Económico Social y la Pacificación del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Codevraem) con el fin de proponer políticas, planes y estrategias para el desarrollo para esta área entre las regiones Ayacucho, Junín, Cusco, Huancavelica y Apurímac.

Por entonces se designó a Luis Rojas Merino como secretario técnico del Codevraem, quien en base a la experiencia de trabajo en la zona y conocimiento de la problemática plantea que el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) sea una región con el fin de darle “sostenibilidad al desarrollo”.

“Hay ideas al respecto. Hay que madurarlas, consensuarlas con la población”, comentó Rojas a El Comercio, quien acotó que el Estado invertirá este año 1.600 millones de soles con la intervención de distintos sectores.

La misma idea comparte el congresista nacionalista Walter Acha, quien en agosto pasado presentó un proyecto de ley ante la Comisión de Descentralización, Regionalización, Gobiernos Locales y Modernización de la Gestión del Estado del Congreso. Lo que plantea es justamente declarar de necesidad pública e interés nacional la creación de la región Vraem.

“La única manera de poder erradicar el narcotráfico, el terrorismo y la pobreza en el Vraem es con la presencia del Estado directo creando una nueva región”, comentó Acha a El Comercio.

Según dijo, aún no hay avances en cuanto a la propuesta, pero insistirá en el debate del proyecto buscando que el Vraem tenga propia autonomía con un gobernador regional y provincias, buscando además mercados para productos como el café, cacao, maní, ajonjolí, achiote, palillo, entre otros.

Cabe recordar que el Vraem es zona de reiteradas intervenciones de narcoavionetas y pistas de aterrizaje clandestinas, así como de destrucción laboratorios clandestinos de droga y plantaciones de hoja de coca. La semana pasada, mandos policiales y expertos en narcotráfico resaltaron la importancia de las intervenciones, pero reconocieron que se trata de un sector en donde hay un problema social que se manifiesta en ocasiones en la oposición a las intervenciones de las fuerzas del orden.