Después de seis fallidos intentos de venta y un largo proceso de reestructuración y liquidación concursal ante Indecopi – iniciado en 2009 - la minero-metalúrgica Doe Run Perú completó la cesión (dación en pago) del Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO) a sus trabajadores.
A partir de ayer, efectivamente, este activo pasó legalmente a manos de 1.305 acreedores laborales, constituidos en torno a la empresa Metalúrgica Business Perú SAC, creada ex profesamente para operar lo que queda en pie de la refinería.
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Y es que, en los últimos dos años, sucesivos liquidadores concursales se vieron precisados a vender maquinarias y equipos en desuso del CMLO para poder pagar deudas y obligaciones, como el derecho de vigencia (por el que tuvo que cancelar US$250 mil días atrás).
Por esta razón, el liquidador concursal Consultores A-1 explicó que antes de hacer entrega del CMLO a los trabajadores desarrollará una inspección de “lo que están entregando para no tener ningún tipo de problemas”.
“Estamos finalizando los inventarios, y apenas finalicemos la parte administrativa el CMLO va a ser entregado como corresponde”, indicó Renato Iriarte, gerente general de la empresa liquidadora.
Agregó que ahora está trabajando en la atención de los trabajadores que no se acogieron al proceso de dación en pago, a los que correspondería el 26% del crédito corriente y el 60% del crédito concursal.
De acuerdo a Iriarte los trabajadores pueden sacar adelante la empresa Metalurgica Business si implementa “un directorio profesional y contrata a gente idónea” para levantar el CMLO.