El agua es un recurso no renovable y en varios países del mundo ya se está acabando, según un ranking elaborado por el World Resources Institute, organización sin ánimo de lucro que investiga los recursos que le quedan al planeta. Ante este panorama, resalta la importancia de enseñarle a los más pequeños del hogar como cuidarla y no malgastarla.
“Siempre se recomienda a los padres concientizar a los más pequeños para que sean parte de este cambio. No solamente en los colegios se debe hablar al respecto, sino también en la casa”, comentó Jaime Sierra, especialista de Pavco Wavin, a Hogar&Familia.
El experto comentó que tanto niños como niñas pueden colaborar en el hogar con “el cerrado de los caños”, además de ya tener presente que tomar duchas o lavarse los manos “debe tener tiempo limitado”. Asimismo, conocer cómo se deben cepillar los dientes correctamente, “de preferencia hacerlo con un vaso de agua nomas”.
“Desde pequeños se les debe tocar el tema, porque ya cuando están jóvenes no lo toman muy en serio. Los niños son muy inteligentes, por eso no hay que ocultarles las cosas. Hay que ser claros y decirles que el agua se está agotando, que los recursos se acaban. Decirles la verdad, tal cual. Muchas veces pensamos que mejor es engañarles, contándoles historias que no son reales”, indicó Sierra.
“Yo creo que, a estas alturas, en estos tiempos, ya no se les puede engañar. Al ser francos, los más pequeños van a tomar conciencia. A la vez, se les puede brindar incentivos, como pequeños premios, cada que veamos que están acatando correctamente el cuidado del agua. Yo tengo hijas y doy fe de que eso resulta si se les habla como se debe”, agregó.
¿Con que ejemplos puedo enseñar a mi hijo pequeño a ahorrar el agua?
De acuerdo al especialista, los pequeños siempre están atentos a lo que sucede en casa, por tal motivo, “los padres deberían actuar de forma adecuada con relación al cuidado de agua para que aprendan en base al ejemplo que ven de ellos”.
“Los niños al arrojar objetos como juguetes, trapos, etc., podrían definitivamente atorar las tuberías de la red de desagüe. El mantener cerradas las tapas de los inodoros y dejar siempre cerrado el baño minimizará estos riesgos. Un atoro implica que se tendría que abrir los registros del baño e insertar varillas para desatorar lo obstruido en el sistema”, precisó.
De otro lado, Sierra alertó a los padres sobre las medidas que se pueden emplear para que los menores no tomen agua directamente desde los caños o grifos.
“El agua de grifo si bien recibe un proceso de desinfección, esto no garantiza un 100% de potabilidad. Estas deberían pasar por un proceso de hervor a temperaturas mayores a 100C°. Recomiendo mantener la tapa cerrada del inodoro y la puerta del baño cerrada, esto es fundamental para reducir riesgos”, acotó.
Cabe destacar que “el goteo en los grifos, duchas y lavados, paredes y techos con humedad visible, malos olores en el baño, atoros en inodoros” son señales de que está funcionando incorrectamente el sistema de agua y tuberías de la casa.