El ex director ejecutivo de la marca de ropa Abercrombie & Fitch Mike Jeffries y su pareja, el británico Matthew Smith, enfrentan acusaciones de explotación por parte de hombres que fueron reclutados y llevados a eventos sexuales organizados en todo el mundo.
Una investigación de la BBC descubrió que una red altamente organizada echó mano de un intermediario para encontrar hombres jóvenes para los eventos de Jeffries y Smith.
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Ocho hombres le dijeron a la BBC que asistieron a estos eventos, algunos de los cuales aseguraron que fueron explotados o abusados.
Jeffries y Smith no respondieron a las peticiones de entrevista.
Pero el intermediario de la pareja negó haber cometido algún delito y dijo que los hombres reclutados asistieron a estos eventos "con los ojos bien abiertos".
Abercrombie & Fitch (A&F), propietaria también de la marca Hollister, se declaró "horrorizada y asqueada" por el supuesto comportamiento revelado.
Dos exfiscales estadounidenses que revisaron de forma independiente documentos y testimonios descubiertos por la BBC pidieron una investigación para determinar si se podrían presentar cargos por tráfico sexual.
Según la ley estadounidense, el tráfico sexual incluye hacer que un adulto viaje a otro estado o país para tener relaciones sexuales a cambio de dinero mediante el uso de la fuerza, el fraude o la coerción.
Advertencia: algunos de los siguientes párrafos de este artículo contienen descripciones de actos sexuales.
El hombre que transformó A&F
A lo largo de dos décadas, desde los años 90, Mike Jeffries transformó A&F. La empresa pasó de ser una tienda de ropa tradicional en decadencia a un minorista para adolescentes con un valor multimillonario, vendiendo sex appeal en sus tiendas con modelos masculinos que no usaban camiseta y vallas publicitarias provocativas.
Jeffries, quien llegó a ser uno de los directores ejecutivos mejor pagados de Estados Unidos, fue una figura controvertida que enfrentó acusaciones de discriminación contra los empleados, generó preocupación por sus onerosos gastos y quejas por la influencia no oficial de su pareja, Matthew Smith, dentro de A&F.
En 2014, Jeffries renunció tras la caída de las ventas, pero se retiró con un paquete de jubilación valorado en alrededor de US$25 millones, según mostraron entonces documentos de la empresa.
La BBC ha revelado ahora acusaciones de que el magnate de la moda explotó a hombres adultos jóvenes con fines sexuales en eventos que organizó en sus residencias de Nueva York y en hoteles de lujo en todo el mundo, incluidos Londres, París, Venecia y Marrakech.
Como parte de una investigación de dos años, la BBC habló con 12 hombres que describieron haber asistido u organizado eventos entre 2009 y 2015 que involucraban actos sexuales para Jeffries, de 79 años, y Smith (60).
Los ocho hombres que asistieron a los eventos dijeron que fueron reclutados por un intermediario, a quien describieron como un hombre al que le faltaba la nariz y que la cubría con un parche de piel de serpiente. La BBC lo ha identificado como James Jacobson.
La BBC llevó a cabo una exhaustiva verificación de los testimonios de los hombres, que presentaban un sorprendente número de similitudes.
Obtuvimos documentos, incluidos correos electrónicos, pasajes de avión e itinerarios de viaje detallados, que respaldaban puntos clave de los testimonios de los hombres. También entrevistamos a decenas de otras fuentes, incluido antiguo personal doméstico.
El reclutamiento
La mitad de los hombres que contaron a la BBC sobre su reclutamiento aseguraron que inicialmente los habían engañado sobre la naturaleza de los eventos o no les habían dicho que involucraban sexo. Otros dijeron que entendían que los eventos serían sexuales, pero no exactamente lo que se esperaba de ellos. Todos recibieron pagos.
Varios declararon a la BBC que el intermediario u otros reclutadores les plantearon la posibilidad de trabajar como modelos para A&F. Todos, excepto uno, dijeron que se sintieron perjudicados por la experiencia.
David Bradberry, entonces de 23 años, dijo que en 2010 un agente le presentó a Jacobson, quien fue descrito como el guardián de "los dueños" de A&F, pero dijo que no había ninguna mención de actividades sexuales. En su reunión, dijo que Jacobson sugirió a Bruce Weber -entonces fotógrafo oficial de A&F- que le hiciera una foto.
Luego, Bradberry dijo: "Jim me dejó claro que, a menos que lo dejara practicarme sexo oral, no me reuniría con Abercrombie & Fitch o Mike Jeffries".
"Me quedé paralizado", aseguró. "Era como si estuvieran vendiendo fama. Y el precio era la sumisión". Bradberry dijo que le habían hecho creer que así es "por donde todo el mundo empieza". Recordaba que Jacobson le dio US$500 y le dijo que el pago era por su tiempo.
Al reflexionar sobre esto, consideró que este incidente debió haber sido "una señal de alerta", pero pensó que Jacobson "era sólo un viejo repulsivo al que no tendría que volver a ver".
Bradberry aceptó una invitación a un evento de día en la antigua casa de Jeffries en los Hamptons en Long Island, Nueva York, vendida recientemente por US$29 millones.
Dijo que entendía que Mike Jeffries era un "hombre poderoso" que podía "construir su carrera". Antes del evento, Jim le dijo que comprara ropa con algunas tarjetas de regalo de A&F, lo que, según él, lo hizo sentir que era "legítimo" y "oficial".
Las reuniones en los Hamptons
En los Hamptons, Bradberry habló con Jeffries y Smith sobre sus aspiraciones de ser modelo de A&F. Más tarde, dijo, Jeffries le puso "poppers" debajo de la nariz, una droga que puede causar fuertes mareos y desorientación, y luego tuvo relaciones sexuales con él.
Hombres que asistieron a estos eventos declararon a la BBC que Mike Jeffries y Matthew Smith mantenían relaciones sexuales con unos cuatro hombres o les "instruían" a que mantuvieran relaciones sexuales entre ellos. Después, los hombres dijeron que el personal del evento les entregaba sobres llenos con miles de dólares en efectivo.
Bradberry aseguró que la ubicación "aislada" y la presencia de personal de confianza de Jeffries, vestidos con uniformes de A&F, supervisando los eventos lo intimidaban como para “no sentir seguridad para decir 'no' o 'no me siento cómodo con esto'".
La investigación de la BBC también encontró detalles de la "maquinaria bien engrasada" que organiza eventos sexuales para Jeffries, en los que:
- Los “reclutadores” encontraban hombres para asistir a sus eventos y recibían entre US$500 y US$1.000 de Jacobson por cada recomendación.
- Jacobson, descrito por los hombres como el “intermediario” o “agente de casting”, reclutaba a los hombres para los eventos sexuales. A la BBC le dijeron que Jacobson enviaba fotos de ellos a Jeffries y Smith.
- La mayoría de los hombres alegan que Jacobson les hizo proposiciones o los “audicionó” sexualmente, solicitando u ofreciendo practicar sexo oral antes de presentarles a Jeffries y Smith.
- Había un “barbero” contratado para afeitar el vello corporal íntimo de algunos de los hombres que asistieron a los eventos, una experiencia que algunos describieron como “deshumanizante”.
- Todos los hombres dijeron que se les exigió firmar acuerdos de confidencialidad. Alegaron que tuvieron poco tiempo para leerlos y no se les permitió conservar copias, pero entendieron que serían demandados si hablaban.
- Un pequeño grupo de los empleados de Jeffries, que vestían uniformes de A&F, supervisó a los hombres, incluso durante los actos sexuales, y les entregó dinero.
- Se alega que Jeffries supuestamente financió toda la operación, incluidos los pagos por recomendaciones, mientras que Smith organizó los pagos en efectivo.
El personal doméstico que trabajaba en la antigua casa de Jeffries en los Hamptons le dijo a la BBC que allí se celebraban eventos regularmente los fines de semana. Algunos dijeron que durante varios años les ordenaron abandonar las instalaciones todos los sábados por la tarde, lo que les hizo creer que algo extraño estaba ocurriendo.
Un exempleado dijo que entendía que era porque su jefe estaba teniendo su "tiempo de recreación".
Barrett Pall, un exmodelo convertido en coach de vida y activista, dijo que se sintió presionado a asistir a un evento en los Hamptons en 2011. Entonces tenía 22 años y dijo que fue reclutado por otro modelo, que recibió un pago por recomendarlo, para que fuera su "reemplazo" para "algún tipo de experiencia sexual" con la pareja.
Dijo que se sentía obligado a obedecer porque el modelo lo había estado apoyando económicamente y se sentía en deuda. Al igual que los demás hombres, aseguró que inicialmente asistió a una "audición" con Jacobson.
Pall dijo que el modelo le dijo que no tenía que hacer “nada que no quieras hacer", pero sugirió que "cuanto más avances, mejor", y aludió a las oportunidades profesionales. Cuando llegó al evento, dijo que se sentía presionado a "participar".
"¿Cómo iba a irme? No tenía auto", dijo. "Tenía un chaperón ahí sentado mirándome".
Pall explicó que uno de los otros hombres reclutados para el evento le practicó sexo oral mientras Jeffries y Smith observaban.
Agregó que la pareja, entonces, lo animó a acercarse a la cama y besar a Jeffries. Posteriormente, otros dos hombres reclutados para el evento tuvieron relaciones sexuales con el jefe de A&F y su pareja. En un momento, Pall dijo que Jeffries estaba detrás de él, tocándolo.
"Creo que esta experiencia me quebró", dijo. "Creo que esto me robó cualquier gramo de inocencia que me quedaba. Me arruinó mentalmente. Pero con el lenguaje que tengo ahora puedo sentarme aquí y decirles que se aprovecharon de mí".
Marrakech
El evento más grande descrito a la BBC se celebró en una villa privada de un hotel de cinco estrellas en 2011, para lo cual decenas de hombres fueron trasladados en avión a Marrakech.
La BBC supo que Jeffries y Smith también habían invitado amigos. Alex, que pidió que se cambiara su nombre para proteger su identidad, dijo que era un modelo en apuros que apoyaba a la manutención de su familia cuando lo reclutaron como bailarín para el evento, donde él esperaba que tendría que desnudarse.
Jeffries "se aprovechó de personas en un momento muy vulnerable de sus vidas, especialmente cuando están en estas grandes ciudades y vienen de pequeños pueblos de EE.UU.", dijo Alex. El exdirectivo era el "capo", afirmó. "Si no fuera por él, nada de esto habría existido".
El joven, quien es heterosexual y por entonces tenía unos 20 años, dijo que Jacobson lo reclutó. Elogió su manera de bailar y le exigió que "terminara el trabajo" practicándole sexo oral. "Tenía deudas y quería mantener a mi familia", dijo Alex. "Hice el trabajo y estaba asqueado".
Pensando que "la parte más difícil ya había pasado", Alex voló a Marrakech para el evento unas semanas después. Pero dijo que momentos después de comenzar su baile, Jeffries intentó besarlo. "Estaba tratando de participar sin ofenderlo. Me sentí extremadamente incómodo", aseguró.
Finalmente, dijo que se escondió en una habitación trasera donde se quedó dormido. Se despertó con un preservativo dentro y temió que el champán que le habían dado antes estuviera adulterado.
"Cuando analizo las cosas, creo que hay una muy buena posibilidad de que haya sido drogado y violado. Probablemente nunca, nunca sabré con seguridad la respuesta de lo que pasó", dijo.
Algunos de los hombres, incluidos Alex y Bradberry, aseguraron que asistieron a más de un evento, ya que Jacobson los convenció de que la próxima vez sería más fácil, además de que esperaban que eventualmente les ofrecieran trabajo como modelos para que "todo esto significara algo".
Estos acontecimientos "afectaron directamente a mi autoestima", afirmó Bradberry. "[La década de] mis 20 años estuvieron llenos de angustia y dificultades, ansiedad y depresión". Pero dijo que ahora vive una vida más tranquila, "llena de esperanza".
Posibles consecuencias
Brad Edwards, un abogado civil que examinó las evidencias de la BBC, dijo que los fiscales estadounidenses deberían investigar si lo que estos "hombres valientes" describen podría ser tráfico sexual.
“Es posible que haya evidencia de coerción para algunos de los hombres, mientras que otros podrían no haber sentido las tácticas coercitivas. Hay que recordar que la coerción es la creencia razonable de que se infligirá un daño grave, y el daño grave podría ser un daño a la reputación, un daño financiero o un daño físico", explicó.
Edwards también dijo que Jeffries y Smith podrían argumentar que los hombres eran adultos que habían dado su consentimiento y que el hecho de que algunos hubieran practicado sexo por dinero en el pasado era "un factor", aunque dijo que las acciones pasadas eran "realmente irrelevantes" para determinar si un acto de sexo a cambio de dinero en particular se debía a la fuerza, el fraude o la coacción.
Sin embargo, dijo que la carga de la prueba para los fiscales era "muy alta".
"Dadas las historias de estos valientes hombres que han dado un paso al frente, creo que es muy importante que los fiscales federales investiguen este caso", dijo.
Elizabeth Geddes, que fue fiscal federal durante más de 15 años y también revisó las evidencias, dijo: "Ciertamente existe un argumento de que estos jóvenes fueron sometidos a posible coerción. Creo que hay motivos para que un fiscal abra una investigación y examinar de cerca esta conducta para determinar si se justifica un proceso penal”.
Jacobson, que ahora tiene 70 años, dijo en un comunicado a través de su abogado que le ofende la sugerencia de "cualquier conducta coercitiva, engañosa o forzosa por mi parte" y que no tenía "conocimiento de ninguna conducta de este tipo por parte de otras personas".
Dijo que no recordaba haber hecho promesas sobre oportunidades como modelo. "Cualquier encuentro que tuve fue totalmente consensuado, no coercitivo", dijo. "Todas las personas con las que tuve contacto y que asistieron a estos eventos entraron con los ojos bien abiertos".
La BBC hizo repetidos intentos por carta, correo electrónico y teléfono, durante varias semanas, de contactar a Jeffries y Smith, invitándolos a responder a una lista detallada de acusaciones para asegurarse de que estuvieran plenamente conscientes de las acusaciones en su contra. Sin embargo, no han respondido.
A&F, que considera a Jeffries como fundador de su época moderna, dijo a la BBC que estaba "horrorizada y asqueada" por su supuesto comportamiento.
Afirmó que la nueva directiva ha transformado la empresa en “la organización basada en valores que somos hoy” y que tiene “tolerancia cero con el abuso, el acoso o la discriminación de cualquier tipo”.