El presidente de España, Mariano Rajoy, ha pedido al Senado autorización para intervenir al gobierno de Cataluña. (Foto: AP/ Video: AFP)
Redacción EC

disolvió el Parlamento de  durante la tarde del viernes. El mandatario convocó a elecciones autónomas en esta región para el 21 de diciembre de este año. Resaltó que busca que estos sean unos comicios "limpios, libres y legales", dijo al término de su discurso ante el Consejo de Ministros.

Se trata de "dar voz" a los catalanes lo antes posible después de la declaración de independencia aprobada por el Parlamento de esa región, añadió Rajoy.

La destitución del presidente catalán, Carles Puigdemont, y de su Ejecutivo son algunas de las primeras medidas para "recuperar la normalidad legal" en Cataluña, según apunta Mariano Rajoy.

Estas fueron tomadas luego de que el Senado autorizara este mismo viernes al gobierno español la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que le extiende poderes extraordinarios para preservar la unidad de España.

El sueño de una República es añejo en la región. La última vez que Cataluña, una región con lengua propia y una fuerte identidad, intentó proclamar la independencia fue en octubre de 1934, cuando el entonces presidente Lluís Companys anunció una "República catalana" dentro de una "República federal española", que se saldó con un fracaso.

La sesión plenaria del Senado destinada a aprobar la intervención de la autonomía catalana comenzó este viernes en Madrid poco después de las 10h locales (3:00 a.m. en el Perú).

El conservador Partido Popular (PP) de Rajoy tiene la mayoría absoluta en el Senado. Además, Rajoy tiene en principio asegurado el apoyo del opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y del liberal Ciudadanos.

- Elecciones 'lo antes posible' -

Rajoy ha asegurado que quiere convocar elecciones en Cataluña en un plazo máximo de seis meses. En esta oportunidad ante el Consejo de Ministros, el jefe de Estado decidió ponerle fecha: 21 de diciembre de 2017.

Cataluña acudió a las urnas hace dos años, y de ahí surgió la actual mayoría independentista que avisó que su objetivo era lograr la anhelada secesión, con o sin la colaboración de Madrid.

A pesar de las advertencias del gobierno y del Tribunal Constitucional, consiguieron organizar un referéndum el 1 de octubre, sin garantías ni censo válido.

Pese a ello, el gobierno regional lo dio por bueno, asegurando que hubo un 90% de síes a la secesión y una participación del 43%.

La bolsa de Madrid se resintió tras la declaración de independencia de Cataluña votada en el parlamento: perdió un 1,45%, con los valores bancarios liderando las pérdidas.

(Fuente: AFP/ EFE)

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