
Informan desde Roma que, con motivo de la santificación de Sor Teresita del Niño Jesús, realizada en la Basílica de San Pedro, la Iglesia ha retomado nuevamente el máximo esplendor y la riqueza que solía emplear en estos actos de profunda solemnidad e inmensa fe. Más de 60.000 personas han acudido a presenciar la santificación de la santa que fue monja de la Orden Carmelita de Lisieux, Francia, que falleció en 1897 a la corta edad de 25 años. Ella, ejemplo de virtudes, hace que se le tenga como espejo de la juventud actual. Muchos miembros de la realeza europea estuvieron presentes. H.L.M.