Fernando Vivas

Que se mastican pero no se pasan es una gran verdad oficialista, la piedra de toque de este gobierno. Vladimir piensa tan mal de Pedro que tras conversar con él el jueves, tuiteó que se habían reunido “en calidad de aliados, no de camaradas”. Para buen entendedor, él no puede ser amigo y correligionario de un ser intelectualmente limitado, desleal, reaccionario y oportunista. Pedro, a su vez, cree que Vladimir es un fanático irresponsable, destructivo y envidioso. Por si se le olvidara tal percepción, muchos colaboradores se la recuerdan a diario.