¿Cuándo es la próxima Luna llena cuarto menguante de abril? Dónde ver desde México

Uno de los eventos más importantes para los amantes de la astronomía es la Luna Llena de abril y sus cuatro tiempos lunares, que iluminaran el cielo nocturno de México brindando un espectáculo inigualable. ¿Cuándo es que se podrá ver este fenómeno y desde dónde se podría observar? En esta nota te contamos todo lo que debes conocer al respecto sobre este importante noticia.

¿CUÁNDO HAY LUNA EN CUARTO MENGUANTE Y DÓNDE VERLA EN MÉXICO?

Este importante acontecimiento astronómico viene generando gran expectativa en México, por lo que millones se alistan para poder verla y así mismo realizan consultas en la web sobre cuándo podrán observarla en su esplendor.

Primero que nada, se debe tener en cuenta que este mes de abril está marcado por la presencia de la llamada Luna Llena Rosa. Para poder observar este fenómeno, según indican las más importantes casas astronómicas, solo se debe alzar la mirada al cielo; ya que esta podrá ser vista a simple vista y sin necesidad de equipos sofisticados.

A este fenómeno le acompañan los cuatro conocidos tiempos lunares. Si deseas verlos, tan solo asegúrate de mirar el cielo los siguientes días:

• Luna llena (100% iluminación): jueves 6 de abril de 2023 a las 6:37 horas.
• Cuarto menguante (entre el 65% y 35% de iluminación): jueves 13 de abril de 2023 a las 11:12 horas.
• Luna nueva (0% de iluminación): jueves 20 de abril de 2023 a las 6:15 horas.
• Cuarto creciente (entre el 35% y 65% de iluminación): jueves 27 de abril de 2023 a las 23:21 horas.

Cabe recordar nuevamente que este fenómeno astronómico podrá ser visto desde cualquier parte del territorio azteca sin necesidad de un equipo especializado. Para mejorar la experiencia, eso sí, se recomienda identificar un cielo despejado durante la noche, sin nubes que puedan limitar la vista.

SOBRE LA ASTRONOMÍA

La astronomía es la ciencia natural que estudia los cuerpos celestes del universo, incluidos las estrellas, los planetas, sus satélites naturales, los asteroides, cometas y meteoroides, la materia interestelar, las nebulosas, la materia oscura, las galaxias y demás; por lo que también estudia los fenómenos astronómicos ligados a ellos, como las supernovas, los cuásares, los púlsares, la radiación cósmica de fondo, los agujeros negros, entre otros, así como las leyes naturales que las rigen.

La astronomía, asimismo, abarca el estudio del origen, desarrollo y destino final del Universo en su conjunto mediante la cosmología, y se relaciona con la física a través de la astrofísica, la química con la astroquímica y la biología con la astrobiología.

Su registro y la investigación de su origen viene a partir de la información que llega de ellos a través de la radiación electromagnética o de cualquier otro medio. La mayoría de la información usada por los astrónomos es recogida por la detección remota, aunque se ha conseguido reproducir, en algunos casos, en laboratorios, la ejecución de fenómenos celestes, como, por ejemplo, la química molecular del medio interestelar.

La astronomía es una de las pocas ciencias en las que los aficionados aún pueden desempeñar un papel activo, especialmente sobre el descubrimiento y seguimiento de fenómenos como curvas de luz de estrellas variables, descubrimiento de asteroides y cometas, etc.

La astronomía ha estado ligada al ser humano desde la antigüedad y todas las civilizaciones han tenido contacto con esta ciencia.

La metodología científica de este campo empezó a desarrollarse a mediados del siglo XVII. Un factor clave fue la introducción del telescopio por Galileo Galilei, que permitió examinar el cielo de la noche más detalladamente. El tratamiento matemático de la astronomía comenzó con el desarrollo de la mecánica celeste y con las leyes de gravitación por Isaac Newton, aunque ya había sido puesto en marcha por el trabajo anterior de astrónomos como Johannes Kepler.

Hacia el siglo XIX, la astronomía se había desarrollado como una ciencia formal, con la introducción de instrumentos tales como el espectroscopio y la fotografía, que permitieron la continua mejora de telescopios y la creación de observatorios profesionales.