Fiat-Chrysler ha anunciado su separación de Ferrari con la finalidad de restructurarse y centrarse en la parte más tradicional del negocio, cumpliendo con los objetivos de su plan 2014-2018.
El grupo hará una oferta pública del 10% del capital de la firma de Maranello en la Bolsa de Nueva York (Wall Street), con posibilidades también en la europea, para que la coticen como empresa independiente. La separación está aun sujeta a la aprobación y regulaciones externas.
Esta ruptura de Fiat y Ferrari se especulaba tras la fusión con el gigante Chrysler. Además de la salida del presidente de la marca del cavallino rampante, Luca Cordero di Montezemolo, que dejó el camino libre para este desenlace.