A lo largo de nuestra vida, tenemos diferentes periodos de dudas, las cuales incluso se pueden reflejar en el día a día. Cuando estas dudas aparecen en temas significativos, el proceso de salir de estas y tomar una decisión se puede convertir en tedioso y complejo. Estas dudas se pueden reflejar en iniciar o dejar una relación, iniciar o dejar un trabajo, tener hijos, etc.
Las personas que tienen problemas de toma de decisiones puede ser por los siguientes motivos:
- Personas indecisas: Creen que son propensos a cometer errores o que no son capaces de gestionar adecuadamente las consecuencias de sus decisiones. La reflexión es difícil porque ven el proceso de toma de decisiones con miedo y ansiedad.
- Perfeccionistas: En general, no se dejan en duda. Siempre pido ciertas ideas ya veces veo las cosas desde puntos de vista “extremos”. Por eso las dudas provocan mucha frustración en el deseo de salir cuanto antes de esta situación. Tienen miedo de cometer errores, lo que puede sofocarlos en el proceso de toma de decisiones.
6 consejos para tomar mejores decisiones en la vida
Según los psicólogos, estos 6 consejos van a servir para la gestión de las dudas durante el proceso de toma de decisiones:
- Asume que decidir es lo normal: A lo largo del día tomamos multitud de decisiones, la mayoría de ellas “automáticas”. Por lo tanto, eres capaz de tomar las decisiones correctas que están presentes en el día. En cada una de ellas pierdes algo y ganas algo.
- No hay una única decisión correcta: Cualquier decisión conllevará riesgos, y sobre todo, siempre se perderá algo. Por eso, no existe la forma correcta ni perfecta de hacer las cosas.
- Céntrate en el presente: Una vez has eliminado la presión de tener que tomar la decisión “perfecta”, ten en cuenta que la que tomes es la mejor para este momento. No te juzgues por decidir lo que decides hoy, pues es lo mejor que hiciste en ese momento.
- La parte emocional es importante: Visualízate tomando una decisión y observa cómo te sientes y qué sucede en el camino.
- Aprende de tu propio comportamiento: Piensa en cómo has tomado diferentes decisiones en tu vida y las consecuencias. ¿Y cómo manejaste esas consecuencias? Si cometemos algún error, es para no volver a hacer a lo largo de la vida.
- Mira tus opciones: Finalmente, has un análisis de tus opciones racionalmente. Piensa en los pros y los contras de cada opción que estés considerando. Después de haber hecho este análisis, has un seguimiento de tu autoestima frente a los criterios con los que suele evaluar lo que le ha sucedido.
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