La intolerancia a la lactosa es la falta de capacidad de nuestro cuerpo para digerir los alimentos con lactosa, un tipo de azúcar natural que se encuentra en la leche y en los productos lácteos. En el caso de las mujeres con esta condición, su salud se ve afectada.
Si al consumir productos lácteos tienes calambres estomacales o diarrea, es muy probable que seas intolerante a la lactosa. Sin embargo, esta no debe ser una situación de preocupación, ya que es más común de lo que crees.
Cabe mencionar que la intolerancia a la lactosa no es lo mismo que una alergia a la leche. Estos son algunos síntomas que presentan quienes son intolerantes a la lactosa:
- Abotagamiento.
- Dolor o retortijones.
- Gases.
- Heces sueltas o diarrea.
- Náuseas o vómito.
¿Cómo afecta la salud de las mujeres?
- Al limitar el consumo de productos lácteos, no obtienen suficiente calcio y vitamina D, los cuales se encuentran presente en diversos alimentos con lactosa.
- La falta de calcio y vitamina D aumenta el riesgo de osteoporosis en el futuro, una afección que debilita los huesos.
¿Existe un tratamiento?
Lamentablemente, no existe una cura o un tratamiento específico para la intolerancia a la lactosa. Sin embargo, se recomienda limitar o evitar los productos lácteos.
Algunas personas sustituyen la leche por leche vegetal o productos alternativos sin lactosa. Otros toman suplementos dietéticos que ayudan a digerir la lactosa, como pastillas de lactasa.