El día menos pensado, tu bebé ya es un niño que necesita una cama y no una cuna, además, pide reemplazar a las ovejas y los conejos que lo acompañaron desde que nació, por viniles de superhéroes.
Antes de que empieces tu gran proyecto de rediseño, te recomendamos tomar en cuenta estos tres factores para elegir el momento idóneo.
Gran cambio. Si tu hijo o hija está pasando por la transición de reemplazar la cuna por una cama, es el momento perfecto para pensar en un rediseño total de la habitación. Retira los muebles que ya no usa como cambiadores y reemplázalos por escritorios o armarios en donde pueda guardar sus nuevos juguetes.
Su propio estilo. Los adolescentes empiezan a preocuparse por tener un espacio que sea realmente suyo y con el estilo que ellos mismos elijan. Recuerda que así como eligen su ropa y la música que escuchan, debes darle la oportunidad de decidir cómo va a lucir su habitación. Entre los objetos que se pueden incluir, figuran cuadros de músicos o de películas, viniles de acuerdo a su estilo y el color de las paredes del cuarto.
Tu presupuesto. Antes de iniciar el proyecto, analiza con cuánto dinero cuentas para llevar a cabo la remodelación, pues corres el riesgo extralimitar tu gasto y dejarlo a la mitad. Te recomendamos consultar precios de materiales y mobiliario antes de arrasar con la decoración actual. Si no cuentas con un gran presupuesto, no te preocupes pues se pueden hacer grandes cambios sin gastar mucho.