El mismo día que la procesión del Señor de los Milagros recorría las calles de Lima con su sahumerio inundando el paisaje, se iniciaba oficialmente la venta de televisores a colores en el país. “Se autoriza importación de aparatos de TV. a color”, publicó El Comercio en su portada del 18 de octubre de 1979. El día anterior el gobierno había hecho el anuncio.
Por esos años era casi un lujo tener un aparato de estas características. Ello debido a que desde 1973, tras una reunión de ministros realizada en Cali, Colombia, se postergó la venta de televisores a color. Pese a ello, el 17 de enero de 1978, el Canal 7, que pertenecía al Estado Peruano hizo la primera trasmisión a color de un evento local, en vivo y en directo. Fue un show por su vigésimo aniversario de fundación.
No fue sino hasta el Mundial de Argentina 1978 que los colores empezaron a cautivar a los peruanos, algo que ya había motivado a que amigos y familias enteras se reunieran en hogares donde se contaba con un televisor a color, llegados al país de contrabando. Los avisos comerciales de mediados de 1979 anunciaban lo costoso que sería obtener el nuevo artefacto, por lo que las tiendas ofrecieron facilidades crediticias a sus clientes. Ofertaban los nuevos televisores a pesar de no tener la autorización para venderlos.
El anuncio esperado
El 17 de octubre de 1979, el gobierno militar de Francisco Morales Bermúdez anunció, mediante el Decreto Supremo N° 145-79-EF, la disolución de la medida que prohibía el ingreso al país de los televisores a color. Un hecho esperado en el país. Días después, se supo que más de 100 televisores de este tipo se hallaban en la Aduana del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez a la espera de ser retirados. La medida permitiría al gobierno de turno captar aproximadamente 15 millones de soles en ingresos.
Al día siguiente del anuncio, muchas empresas promocionaban abiertamente la venta del nuevo aparato. “¡Ahora sí! Todos los peruanos podrán tener en su hogar el primer televisor a colores. Al fin es una realidad. Ahora todos los peruanos podrán disfrutar libremente de la belleza de la imagen a colores en su propio hogar”, anunciaba el aviso publicitario de Carsa, la cual anunciaba la venta del televisor a color “Sony Trinitron”.
Otros, como la tienda Ferrand, ofrecían precios especiales a sus primeros 100 compradores; mientras tanto algunos centros de reparaciones explicaban las ventajas de asegurar una reparación técnica adecuada y prometían instalar “antenas” de televisores a colores.
El fuerte cambio del color
El domingo 21 de octubre de 1979, Carsa anunció, a través de El Comercio, la primera venta de televisores a color. “Desde hoy domingo los televisores Sony Trinitron se venden en el Perú”, se leía en el aviso. Además, Carsa incluía los precios por pulgadas, los lugares de venta y los horarios de atención. Otros como Philco, pionero en el rubro de radio y televisión, insinuaban un color más preciso. “Ahora lo mejor. Philco color-plus, ni más, ni menos el color preciso”, explicaba su llamativo aviso.
El lunes 22 de octubre de 1979, llegó el primer lote de televisores a colores procedentes de Panamá. Fueron 320 unidades de 700 que habían sido encargadas por una firma comercial local para su primera venta al público.
Los canales de televisión también cambiaron. Fernando Vivas en su libro “En vivo y en directo. Una historia de la televisión peruana” (2008) lo describe: “El lento remontar vuelo que la televisión vivió a partir de 1980 tiene un factor dual en el color: por un lado su introducción elevó costos y complicó técnicamente el despegue; por otro lado, marcó positivamente la nueva etapa”.
El Canal 4 adquirió cámaras a color, algo que Panamericana Televisión (Canal 5) ya había previsto con la idea de cubrir todas sus necesidades. Por eso, en febrero de 1980 transmitió ‘Promo 80’, presentado por Jorge “Coco” Beleván y Carla Peralta, en donde anunciaban su nueva programación a todo color. Aunque América ya se había lucido antes con un especial de Lucía Méndez. Una competencia que hizo que algunos programas, entre ellos “Risas y Salsa”, emitido por Canal 5, pasaran del blanco y negro al color rápidamente en 1980.
Así fue como, poco a poco, la audiencia y la televisión peruana fueron cambiando. Todo se dio progresivamente. Primero con la derogación de ley que impedía la venta de estos televisores, y luego con las nuevas producciones que brindaban las casas televisivas. El color fue invadiendo así los hogares nacionales.