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¿Quién es Talia Castro-Pozo, la peruana detrás de Sunset Salsa, el fenómeno que hace bailar a Nueva York y genera comunidad?
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¿Quién es Talia Castro-Pozo, la peruana detrás de Sunset Salsa, el fenómeno que hace bailar a Nueva York y genera comunidad?

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Por las tardes de verano en , cuando el sol se esconde detrás del río Hudson, un muelle se convierte en pista de baile. Niños, jóvenes, adultos mayores, turistas, profesionales y vecinos de la ciudad se encuentran allí para dejarse llevar por la salsa, guiados por la energía de Talia Castro-Pozo ( en Instagram), bailarina peruana que hace más de dos décadas encontró en Estados Unidos un espacio para reinventarse.

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La historia de Castro-Pozo con el arte empezó desde temprano. Hija de un periodista y de una maestra, Talia recuerda pasar los fines de semana en teatros y funciones de ballet. Fue en un espectáculo de la legendaria Alicia Alonso en el que todo cobró sentido: “Tenía tres o cuatro años, pero lo recuerdo vívidamente. Llegué a casa bailando y no paré más”, precisa.

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Juan Carlos Fangacio

Lo siguiente sería innato. Con apenas 16 años, Talia ya integraba el Ballet Nacional del Perú. Poco después, circunstancias familiares y políticas la llevaron a migrar. En Nueva York, estudió con grandes maestros del ballet clásico, hasta que una lesión la obligó a abrirse a otros estilos: jazz, ballroom, ritmos latinos. Además de plantear un giro definitivo en su identidad artística. “Estaba en un momento de quiebre. Lesionada por una constante presión sobre mí misma, mi desempeño en el ballet, mi autoestima y mi físico. La lesión me frenó y me pregunté si eso era lo que quería para mi vida”, precisa, apenas tenía 19 años cuando eso ocurrió.

Finalmente, decidiría abrir su camino hacia una mirada más amplia del baile y sus bondades. Durante años trabajó en estudios de baile, organizó eventos y se vinculó con la vibrante escena latina de la ciudad. “Lo lindo del baile social es que no es elitista como el ballet clásico. Une a toda la comunidad: desde principiantes hasta bailarines internacionales”, apunta. Esa es la esencia de Sunset Salsa, el proyecto gratuito que dirige y que orgullosamente ha reunido hasta cinco mil personas cada semana. En una Nueva York acelerada y ruidosa, el muelle se transforma en un oasis donde el baile se convierte en lenguaje común.

Del Perú para el mundo

Talia Castro-Pozo destacó como bailarina del Ballet Nacional del Perú desde temprana edad. A los 16 años ya era una de las figuras más talentosas del elenco y cuando migró a Nueva York estudió en prestigiosas escuelas. Puede seguir su travesía en el universo de los ritmos latinos y el poder del baile en comunidad a través de su Instagram @taliacp.

Aunque la noticia del popular Sunset Salsa de Talia llegó hace poco a tierras peruanas desde redes sociales, lo cierto es que el impacto de esta bailarina no se ha limitado solo a Estados Unidos en los últimos años, replicándose en ciudades como Toronto y Montreal. “No le cierro las puertas a llevarlo algún día a mi país, si es que alguien se suma al proyecto y nos ayuda con las gestiones necesarias. En todos los lugares del mundo la gente necesita comunidad más que nunca. Bailar juntos es una forma de sanar”, asegura.

Hoy, el muelle 45 del río Hudson se llena cada verano y, desde este año, también en otoño. “La acogida ha sido tanta que a pesar de que el verano ya empieza a despedirse, pronto abriremos las fechas para las sesiones de baile en otoño”, indica Castro-Pozo. Más allá de los escenarios multitudinarios sobre los que alguna vez danzó, Talia subraya el poder sanador del movimiento. “Bailar estimula el cerebro, genera oxitocina, la hormona de la felicidad. Es terapéutico”, dice, convencida de que el baile nos une a todos por igual en cada compás. //

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