
Estamos de acuerdo en que la infraestructura requiere de peajes para su operación; con ellos se financian las inversiones, el mantenimiento y la propia operación.
Los aviones pagan por el uso de los aeropuertos, los barcos por los puertos, el gas por los gasoductos, la electricidad por las líneas de transmisión, los vehículos por las carreteras, etc.
Soy partidario de los peajes en las carreteras siempre que estén bien mantenidas y que sean justos.
Los que vivimos en el primer gobierno de Alan García somos testigos del deterioro y dificultad de transitar por falta de mantenimiento.
El costo de los repuestos por el pésimo estado de las pistas y el tiempo perdido justificaban el cobro de peajes.
No soy partidario de la ineficiencia. Me explico: ¿han visto las colas para pagar peajes? ¿Saben ustedes que en otros países la concesionaria debe dejar pasar gratis a los vehículos si la espera es mayor a dos minutos?
En Lima las colas podrían reducirse sustancialmente si se incentiva el uso del peaje electrónico (por ejemplo, el e-pass), pero es al contrario, pues se desincentiva.
Sí, si ustedes van a adquirir un pase electrónico, deben pagar por el pase físico (S/20), y además pagar una tasa de recarga que va de S/2 a S/9 por la recarga.
Es decir, más barato es hacer tu cola de diez minutos para pagar con efectivo o tarjeta de crédito.
No hay beneficio económico alguno por usar el pase electrónico, más bien hay una penalidad.
¿No se dan cuenta los concesionarios que al usar el peaje electrónico no solo se ahorra el tiempo de los usuarios, sino que también se reduce el costo de los tres turnos por caseta del personal de cobranza?
Señores concesionarios, señores de Ositrán (Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público), trabajemos en fórmulas para que todos ganemos, y no que todos pierdan.
Finalmente, sería ideal si pudiéramos unificar en una sola tarjeta todos los peajes del Perú. Eso mejor se lo dejamos al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).