XXXTentacion, el rapero de 20 años que falleció tiroteado este lunes en Miami, era un joven lleno de contradicciones. El estadounidense nacido al sur de Florida utilizó el género SoundCloud Rap para cantar contra el racismo. Pero fuera del escenario acumuló denuncias por violencia doméstica que hicieron que la plataforma de música Spotify lo eliminara de sus lista de recomendaciones el mes pasado. Aunque luego lo restituyó.
Jahseh Dwayne Onfroy, su verdadero nombre, tuvo una infancia dura en la que, al igual que en sus videos musicales, la violencia tuvo un papel destacado.
Era hijo de una madre adolescente que entraba y salía de su vida, dejando la crianza de Onfroy en manos de su abuela, amigos de la familia y niñeras.
La violencia fue la herramienta que el pequeño Onfroy usaba para llamar la atención de su progenitora. "Yo solía pegarle a otros niños en el colegio solo para que ella me hablara, me gritara", confesó en una entrevista publicada a principios de mes por el periódico "Miami New Times".
Aunque también la utilizaba para defenderla. Según contó en un podcast publicado en la cuenta de Youtube de No Jumper, cuando tenía seis años le "arrancó carne de un mordisco" y "apuñaló con un vidrio roto" a un hombre que le había puesto las manos encima a su madre. Según el rapero, ella siempre se metía "en situaciones en las que no podía cuidarme... Ella me quería cerca, pero no podía permitírselo".
Tras ser expulsado de la escuela secundaria por las peleas en las que se metía, canalizó su energía y furia en la música.
ESTRELLA DEL SOUNDCLOUD RAP
Onfroy se convirtió en el artista más popular del SoundCloud Rap, un género caracterizado por sus ritmos lánguidos y difusos, procedentes de una gran variedad de estilos que incluyen el grunge, el hip-hop y el indie.
Ya convertido en XXXTentacion, lanzó su primer single, "Look At Me!". En un video que resume sus contradicciones, el rapero incluye esta canción de letra machista y la acompaña con "Riot", otra en la que habla sobre la violencia racial.
El video musical parece ser una especie de ajuste de cuentas con el racismo en Estados Unidos.
En las imágenes, hace referencia a las muertes de Emmett Till, un adolescente negro asesinado en 1955 por coquetear con una mujer blanca; Philando Castile, a quien un policía disparó en 2016 tras detener su auto y pedirle la licencia de conducir, y Heather Hyer, la activista que el año pasado fue arrollada por un auto mientras protestaba contra supremacistas blancos en Charlottesville.
También se puede ver escenas que recuerdan a las protestas en Ferguson en 2014 por la muerte de Michael Brown, un joven negro abatido por un policía, y una en la que el rapero ahorca a un niño blanco.
Sin embargo, la popularidad de XXXTentacion quedó opacada rápidamente por sus problemas legales. Su ex pareja lo denunció por haberle golpeado en la cabeza, intentado estrangularla y pateado.
La mujer lo acusó de haber amenazado con suicidarse varias veces, de haberle pegado cuando estaba embarazada y hasta de haberla secuestrado.
XXXTentacion pasó una temporada en la cárcel y otras dos bajo arresto domiciliario hasta que a principios de este año le dieron permiso para que realizara una gira.
Y todo pese a que a los cargos que enfrentaba se habían sumado otros como el de manipulación de testigos.
A sus fanáticos, sin embargo, parecía no importarles (o incluso, atraerles) las tribulaciones del artista: su disco llegó a ocupar el primer puesto de los ránkings en Estados Unidos.
Según el representante de Onfroy, Solomon Sobande, su vida turbulenta fue lo que hizo tan atractiva su producción musical. "Es solo un muchacho joven que estaba perdido y necesitaba una oportunidad en la vida", le dijo a la revista Billboard el año pasado.