Elon Musk respondió a un debate en Twitter sobre su estilo de gestión, que ha sido objeto de intenso escrutinio desde que se hizo con el control de la plataforma.
Durante el debate, el usuario @TSLAFanMtl expresó su desacuerdo con la política de precios de Tesla, lo que provocó que otro usuario saltara en defensa de Musk y acusara al primero creerse más listo que el magnate.
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“¿Me creo más listo que Elon? no. ¿Quiere decir esto que su gestión o él lo hagan todo bien al 100%? No. No idolatremos e intentemos ser objetivos. Esta respuesta es sectaria”, se defendió el usuario que inició la discusión
Entonces, Whole Mars Catalog, una cuenta que suele interactuar con el CEO de Tesla, expresó su acuerdo con la idea de debatir y discutir sobre lo que la compañía debería hacer en Twitter, involucrando tanto a empleados como gerentes en la conversación para ayudar a impulsar la empresa y sus objetivos.
Según Whole Mars Catalog, “Lo que me encanta de Twitter Tesla es que podemos debatir y discutir lo que la compañía debería hacer, y que los empleados y los gerentes se unan a la conversación, para así intentar en última instancia impulsar la compañía y sus objetivos”. Además, señaló que “lo de Elon sabe más es un argumento terrible”, y añadió que, aunque Musk es una persona brillante, también puede equivocarse.
La más curioso de todo es que el propio Musk se unió a la conversación diciendo: “A veces soy más tonto de lo que me gustaría”.
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Desde que asumió el control de Twitter en octubre, los métodos de Musk al dirigir la compañía han sido objeto de críticas constantes. Una de sus primeras medidas fue reducir a la mitad la plantilla, que ahora consta de menos de 1.300 empleados, según señaló CNBC. Además, el magnate despidió tanto a altos ejecutivos como a trabajadores que criticaron su liderazgo.
En noviembre, Musk también emitió un ultimátum a la plantilla, exigiéndoles que adoptaran su visión para un “Twitter 2.0″. Esta visión requería trabajar “muchas horas con alta intensidad” o arriesgarse a ser despedidos.
A finales de marzo, el empresario envió un correo electrónico a los empleados anunciando que la asistencia a la oficina ya no era opcional. Esta medida se produjo después de que las políticas de teletrabajo de la empresa se eliminaron en noviembre.
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