Philip Morris Internacional. (Foto: El Comercio)
Philip Morris Internacional. (Foto: El Comercio)
Redacción EC

Cigarrillos electrónicos o parches de nicotina han servido por años como herramientas para combatir la adicción al cigarrillo; pero la industria tabacalera se ha reinventado en lo que podría ser la solución a una gran adicción. El Comercio tuvo acceso a la última tecnología para dejar de fumar y reducir los riesgos en salud.

iQOS es el nuevo dispositivo de tabaco sin humo ni combustión que, asegura, podría ser menos perjudicial. El producto fue promocionado en el Technovation de Philip Morris Internacional (PMI), en Suiza, y ya cuenta con 5.8 millones de usuarios en el mundo; es decir, casi 6 millones de personas que han dejado el cigarrillo en el planeta.

“La nicotina es adictiva y no está exenta de riesgos. El daño principal viene de todos los químicos que se generan al fumar y hacer combustión con el tabaco. No de la nicotina”, afirma Moira Gilchrist, VP Scientific de PMI.

“La mejor solución es nunca empezar a usar nicotina o productos de tabaco. Y los que han empezado deben detenerse. Pero los hombres y las mujeres que fuman, que de otra manera seguirán utilizando cigarrillos, deben considerar el cambio a un producto sin humo basado en la ciencia”, asegura Gilchrist.

Con iQOS, la científica de la industria del tabaco demostró que el dispositivo de tabaco calentado viene reduciendo en 90 % los químicos carcinogénicos (-15 químicos) y un 95 % en los daños producidos al ADN.

Esta tecnología promete revolucionar la adherencia al tratamiento para dejar de fumar y ayudar a los fumadores a frenar dramáticamente las inquietantes estadísticas del tabaquismo en el mundo.

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