Termina para el Perú un año muy especial, largamente esperado, el Año del Centenario de la Batalla de Ayacucho, que marcó un hito de gran importancia en nuestra historia y en la de toda América del Sur, pues ese triunfo puso punto final a tres siglos de dominación española. Lo hemos celebrado con entusiasmo patriótico y fraternidad americanista. A nuestras playas llegaron para congratularnos importantes delegaciones de países vecinos y amigos que han reafirmado con creces esa amistad dejándonos también recuerdos espirituales y materiales imperecederos. H.L.M.
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