Laura Borlini habla de su hermosa experiencia por Noruega

“Este es un país a donde, curiosamente, mi esposo tuvo que convencerme para ir. La verdad es que tenía mucha expectativa por conocer los países escandinavos en general y cuando pisé Noruega, quedé más que sorprendida.

Oslo, su capital, es limpia, ordenada, con bosques y lagos, una arquitectura preciosa, con casas talladas en madera y pintadas con colores frescos. Los restaurantes perfectos para quienes aman los mariscos.

Dicen que sus habitantes son las personas más bellas y serviciales del mundo y realmente es así.

Son muy preocupados por su imagen, jamás vas a ver un carro despintado o una casa  desarreglada, todo es fino y de buen gusto.

Ideal para recorrer con alguien que ame caminar, disfrutar de los paisajes y la buena comida”.