El es una forma de negociación con instrumentos derivados (CFD).

Esto significa que, en lugar de invertir directamente en un activo financiero, la negociación se realiza a través de un contrato basado en el valor del activo correspondiente.

Por ejemplo, en lugar de comprar o vender acciones directamente, usted compra y vende un contrato cuyo valor depende del precio de la acción subyacente.

Las operaciones con CFD pueden parecer complicadas para los principiantes, pero en realidad son bastante sencillas. En la mayoría de los casos, las operaciones con CFD funcionan igual que la compra directa de acciones. Si el valor de las acciones sube un 5%, el valor de su contrato CFD también sube un 5%.

Sin embargo, existen algunas ventajas específicas de operar con CFDs online. Analizaremos estas ventajas a lo largo de este artículo, pero uno de los aspectos más importantes es la posibilidad de operar casi cualquier instrumento financiero disponible con CFDs.

Puede operar con acciones, por ejemplo, así como con divisas, materias primas, criptodivisas, fondos cotizados (ETF), bonos y mucho más.

Ejemplo de negociación CFD - Simulación CFD

Analicemos un ejemplo para saber cómo funciona el comercio CFD. Supongamos que desea comprar acciones de Royal Mail, que cotizan a 181 peniques por acción. Puede visitar su broker de CFDs y comprar CFDs sobre acciones de Royal Mail por valor de 181p por contrato.

Si el precio de las acciones de Royal Mail sube a 190 peniques, el valor de sus contratos CFD también subirá a 190 peniques. Si decide vender sus contratos a este precio, obtendrá un beneficio del 9,5%, exactamente el mismo beneficio que obtendría si hubiera comprado acciones de Royal Mail directamente.

Qué puede negociar un operador con CFDs

Como ya se ha mencionado, es posible operar varios instrumentos financieros en CFDs, además de acciones.

Los CFDs son extremadamente flexibles, por lo que pueden utilizarse para operar con cualquier tipo de instrumento financiero. Algunos tipos populares de CFDs incluyen:

  • CFDs sobre acciones
  • CFD sobre divisas
  • CFDs sobre materias primas (por ejemplo, oro, plata y petróleo)
  • CFDs sobre criptomonedas
  • CFDs sobre ETFs
  • CFD sobre bonos.

Aunque estos son los tipos más comunes de CFDs ofrecidos por los principales brokers, sería posible operar CFDs sobre tipos menos comunes de activos financieros.

En cualquiera de estos activos, el valor del CFD sigue directamente el precio del activo subyacente. Por ejemplo, imagine que empieza a operar con CFDs sobre Bitcoin. Si el valor de Bitcoin sube un 2%, el valor de su CFD sobre Bitcoin también subirá un 2%.

Lo mismo ocurre con Forex, materias primas, índices y cualquier otro activo con el que opere en CFDs.

Razones para ser un operador de CFD

Dado que es posible comprar acciones y otros activos directamente, ¿cuáles son las razones para utilizar CFD? Hay varias ventajas particulares que hacen que el trading con CFDs sea tan popular.

Propiedad indirecta

La principal ventaja de los CFDs es que usted no tiene que tomar posesión del activo subyacente. Esto puede no parecer un gran problema si sólo opera con acciones - en la mayoría de los casos, los certificados de acciones se almacenan digitalmente en una cuenta de negociación de acciones, sin requerir ningún esfuerzo por su parte para comprar o vender.

Pero ¿y si quiere operar con pares de divisas o materias primas esenciales como el petróleo? Para comprar petróleo directamente, hay que encontrar transporte para los barriles físicos de crudo e instalaciones de almacenamiento.

El comercio de divisas requiere la conversión de una moneda a otra, lo que a menudo implica navegar por la compleja legalidad y la normativa fiscal asociada a las divisas extranjeras. Cuando opera con CFD, no tiene que preocuparse por ninguno de estos problemas. Usted sólo compra un contrato, no un barril de petróleo o una divisa extranjera: el potencial de beneficiarse de las fluctuaciones del precio del activo respectivo es el mismo.

Apalancamiento en CFDs

Quizás la razón principal por la que los CFDs son tan populares entre los operadores de bolsa es la posibilidad de operar con apalancamiento. Con el apalancamiento, el operador esencialmente utiliza dinero prestado de su corredor para aumentar el tamaño de su posición.

Supongamos que desea comprar acciones de AstraZeneca, que actualmente se venden a 8,60 euros. Si tuviera 100 euros en su cuenta de operaciones, sólo podría comprar 11 contratos de CFD. Sin embargo, con el apalancamiento, usted puede invertir más dinero del que tiene disponible en su cuenta de operaciones con CFDs. Por ejemplo, si utiliza un apalancamiento de 1:10 en sus operaciones, puede comprar 110 contratos de acciones de AstraZeneca (un coste total de 946 euros) con sólo 100 euros en su cuenta.

La ventaja de utilizar el apalancamiento es la posible multiplicación de sus beneficios si aumenta el valor de las acciones de Astra Zeneca. Por cada aumento del 1 por ciento en el precio del activo subyacente, el precio de su posición en CFDs - con apalancamiento 1:10 - aumenta un 10 por ciento. Por lo tanto, con el apalancamiento, puede multiplicar los beneficios de las operaciones realizadas con éxito. Además, como necesita invertir menos dinero en cada posición, puede diversificar sus operaciones sin añadir más dinero a su cuenta.

Ganar dinero con CFDs en ambas direcciones

Otra de las principales ventajas de operar con CFDs es la posibilidad de obtener beneficios incluso cuando los precios de los activos caen. Puede abrir una orden de venta corta para sus contratos CFD en lugar de comprar.

Inversión fraccionaria

Otra ventaja de negociar acciones mediante CFDs, especialmente si invierte en acciones caras como Amazon. Con los CFD sobre acciones, puede invertir tanto como quiera, no está obligado a comprar acciones enteras.

Así, aunque el valor de cada acción de Amazon supere los 3.400 $, la mayoría de los brokers de CFDs le permiten invertir cualquier cantidad, como por ejemplo sólo 50 £ en cada inversión.

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