(Ilustración: Víctor Aguilar Rúa).
(Ilustración: Víctor Aguilar Rúa).

Los ómnibus que partiendo de la Plaza de Armas van a Miraflores, avanzan a “paso de procesión” mientras están en la ciudad, con el propósito de recoger pasajeros y tener el vehículo lleno cuando llegan a la avenida Leguía. Muchos usuarios protestan por esta pérdida de tiempo que nosotros condenamos, ya que un servicio de trasporte debe hacerse bajo dos premisas: seguridad y rapidez. Como en la avenida Leguía raramente suben pasajeros, los ómnibus van a buena velocidad y de esa manera recuperan en algo todo lo perdido en la zona urbana. H.L.M.

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