Escenarios como los planteados por el presidente Martín Vizcarra y algunos congresistas se han dado ya en los últimos años en el Perú. (El Comercio)
Escenarios como los planteados por el presidente Martín Vizcarra y algunos congresistas se han dado ya en los últimos años en el Perú. (El Comercio)
René Zubieta Pacco

La propuesta de adelanto de elecciones generales realizada por el presidente en su mensaje a la nación por Fiestas Patrias fue, sin duda, sorpresiva. Y toda acción tiene una reacción. Desde las agrupaciones políticas del Congreso, son varias las voces que están pidiendo que el mandatario y la vicepresidenta Mercedes Araoz renuncien para que recién así proceda un nuevo proceso electoral en el 2020.

Ambos escenarios no son nuevos en la reciente historia del Perú. Los gobiernos de Pedro Pablo Kuczynski (PPK) y Alberto Fujimori culminaron abruptamente, con coyunturas que recordamos a continuación.

—La renuncia de PPK—
Ocurrió hace un año y cuatro meses. Kuczynski duró un año y siete meses en el poder. ¿El contexto? A inicios de marzo del 2018, congresistas de distintas bancadas presentaron una segunda moción de vacancia contra el entonces mandatario —la primera fue rechazada en diciembre del 2017— por, según señalaron, existir nuevas evidencias de que él mintió en cuanto a su relación con la constructora Odebrecht, que ha reconocido haber pagado coimas en el Perú.

Lo que decía la segunda moción de vacancia contra PPK, que no se llegó a votar.
Lo que decía la segunda moción de vacancia contra PPK, que no se llegó a votar.

Ese era el tenor de la moción, que inicialmente parecía no iba a tener los votos suficientes para ser aprobada. Pero hubo una gota que derramó el vaso y dio la estocada final a las ya previamente desgastadas relaciones con el Parlamento. Encabezados por su entonces vocero Daniel Salaverry, congresistas de Fuerza Popular dieron el 20 de marzo del 2018 una conferencia de prensa en la que difundieron extractos de videos que dieron cuenta de la presunta intención de compra de votos para evitar la destitución de PPK.

Fueron grabaciones realizadas por Moisés Mamani, de Fuerza Popular, a quien los ahora suspendidos legisladores Kenji Fujimori, Bienvenido Ramírez y Guillermo Bocángel le habrían ofrecido la gestión de obras a través de los ministerios de Economía y de Transportes. Esto a cambio de votar contra la vacancia.

Moisés Mamani

Pero a menos de 24 horas de que se debata la moción, PPK decidió anunciar el 21 de marzo su renuncia. Fue a través de un mensaje a la nación grabado, en el que estuvo acompañado de su Gabinete. Este era encabezado entonces por la segunda vicepresidenta Mercedes Araoz. Los videos hicieron que la suerte esté echada para Kuczynski, incluso miembros del oficialismo pidieron la dimisión.

De cara a la sucesión, fuentes de Palacio de Gobierno comentaron a este Diario que, la madrugada del día en que anunció su renuncia, PPK llamó por teléfono a su primer vicepresidente y entonces embajador en Canadá, Martín Vizcarra. Horas después del anuncio de la renuncia, este último rompió el silencio mantenido con un mensaje en Twitter: “Estoy indignado por la situación actual, como la mayoría de peruanos. Pero tengo la convicción de que juntos demostraremos una vez más que podemos salir adelante. Por ello, regreso al Perú para ponerme a disposición del País, respetando lo que manda la Constitución”.

Mercedes Araoz comunicó a los miembros de su Gabinete la decisión de Pedro Pablo Kuczynski y les adelantó su renuncia como primera ministra, pero no como segunda vicepresidenta.

Hoy Araoz es la vicepresidenta del mandatario Vizcarra y su rol es clave ante las voces que desde el Congreso plantean que haya adelanto de elecciones generales solo si ambos renuncian a sus cargos.

—La caída de Fujimori y las nuevas elecciones—
Tras 10 años en el poder y una mayoría absoluta en el Congreso desde 1995, Alberto Fujimori tentó nuevamente la presidencia en el 2000 con Alianza Perú 2000, la ganó —ya sin esa preponderancia en el Parlamento— en medio de acusaciones de fraude y reasumió el cargo pese a protestas como la ‘Marcha de los 4 suyos’, que encabezó el hoy prófugo Alejandro Toledo. Pero ese año en el que el hoy encarcelado exmandatario buscó mantenerse en el poder marcó, en realidad, su tumultuoso alejamiento de mismo.

La mencionada coalición estuvo integrada por el partido Vamos Vecino, que para su inscripción —como comprobó en su momento la Unidad de Investigación de El Comercio y sentenció el Poder Judicial— recurrió a la fabricación de firmas falsas. Este fue solo uno de los tantos elementos de la podredumbre en la que cayó el régimen, pues el hito principal fue la difusión de los llamados ‘vladivideos’. En estos se evidenció lo que se consideraba un secreto a voces: que a través del asesor hoy también preso Vladimiro Montesinos, el gobierno compraba a los miembros de la oposición para sumarse a las filas del fujimorismo.

El 16 de setiembre, dos días después de la difusión del primer ‘vladivideo’, Fujimori dio un mensaje a la nación anunciando la desactivación del Sistema de Inteligencia Nacional (SIN) y anunciando su decisión de “convocar en el inmediato plazo posible a elecciones generales”.

Alberto Fujimori

Tres días después del anuncio, el Ejecutivo lo concretó presentando al Congreso un proyecto de reforma constitucional planteando incorporar una disposición especial que estableciera que las autoridades elegidas en los comicios del 2000 culminaran su mandato el 28 de julio del 2001. Pero hubo otra propuesta que vino del entonces legislador de Solidaridad Nacional y hoy líder de Alianza para el Progreso, César Acuña.

Acuña planteó otra reforma constitucional para eliminar la reelección presidencial inmediata y modificar la duración del mandato del presidente, vicepresidentes y congresistas elegidos el 2000. Así, la fórmula legal resultante acumuló ambas propuestas, se aprobó en el pleno el 5 de octubre del 2000, se ratificó el 2 de noviembre y se publicó el día 6 de ese último mes.

Es decir, entre la presentación del proyecto del Ejecutivo y la publicación de la reforma transcurrieron 48 días.

“…Hay que decirle al Perú que hoy más que nunca vamos a desprendernos de nuestros intereses personales y que queremos recuperar la democracia y la institucionalidad del país. En ese sentido, los 120 congresistas tenemos una responsabilidad moral para con nuestra población; por lo tanto, debo decir que estamos de acuerdo con la convocatoria a nuevas elecciones generales, para elegir un nuevo presidente y un nuevo Congreso”, dijo Acuña Peralta el día de la primera votación en el pleno.

César Acuña, que en el 2000 llegó al Congreso con Solidaridad Nacional, presentó uno de los proyectos que permitió la reforma constitucional que dio paso a los comicios del 2001. (Foto: Congreso)
César Acuña, que en el 2000 llegó al Congreso con Solidaridad Nacional, presentó uno de los proyectos que permitió la reforma constitucional que dio paso a los comicios del 2001. (Foto: Congreso)

La crisis política e institucional seguía en auge. A más ‘vladivideos’ se sumaron otros hechos como la fuga de Montesinos del Perú el 29 de octubre del 2000 y la decisión del Congreso de censurar a Martha Hildebrandt —aliada de Fujimori— en su cargo de presidenta de la Mesa Directiva el 13 de noviembre de ese año.

Lo que vino luego fue la renuncia de Fujimori. El 15 de noviembre del 2000, viajó a Brunéi, en el sudeste asiático, para asistir al foro APEC. Luego se dirigió a Tokio para desde ahí partir a Panamá a fin de participar en una cumbre de líderes latinoamericanos, pero decidió quedarse en dicha ciudad de Japón.

La carta de renuncia firmada por Alberto Fujmori.
La carta de renuncia firmada por Alberto Fujmori.

En diálogo con este Diario hace unos años, el ex primer ministro Federico Salas recordó cómo se enteró de la decisión de Fujimori. Contó que alrededor de las 5 a.m. del 19 de noviembre del 2000, aquel lo llamó para comunicarle la medida, y que le iba a enviar un fax con la carta de renuncia, que también oficializaría ante el Parlamento.

La carta firmada por Fujimori fue remitida horas más tarde a Valentín Paniagua, quien había asumido la presidencia del Congreso. Sin embargo, dicho poder del Estado decidió no aceptar los términos de la misiva y determinó —tras un furibundo debate— vacarlo del cargo por incapacidad moral permanente el 21 de noviembre del 2000, con 62 votos a favor,, 9 en contra y 9 abstenciones.

Con las renuncias de los vicepresidentes Francisco Tudela y Ricardo Márquez, Paniagua asumió el gobierno transitorio hasta el 28 de julio del 2001, cuando Alejandro Toledo se encumbró con la banda presidencial. El resto es historia. El capítulo de cara al 2020 ya ha empezado a escribirse.

Parte de la portada de El Comercio tras la destitución de Alberto Fujimori.
Parte de la portada de El Comercio tras la destitución de Alberto Fujimori.
El texto final de la reforma que permitió las elecciones del 2001.
El texto final de la reforma que permitió las elecciones del 2001.