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Redacción EC

Los y humos tóxicos producen partículas que pueden dañar los ojos y el sistema respiratorio. También pueden empeorar crónicas del corazón y del pulmón.

Un problema habitual en estos casos es la intoxicación con monóxido de carbono. Esto ocurre debido a que el carbono se acumula en el torrente sanguíneo. Cuando hay demasiado monóxido de carbono en el aire, el organismo reemplaza el oxígeno de los glóbulos rojos con este gas, pudiendo provocar un daño grave en los tejidos o incluso la muerte.

Cuando hay demasiado monóxido de carbono en el aire, el organismo reemplaza el oxígeno de los glóbulos rojos con este gas, pudiendo provocar un daño grave en los tejidos o incluso la muerte. (Foto: Pixabay)
Cuando hay demasiado monóxido de carbono en el aire, el organismo reemplaza el oxígeno de los glóbulos rojos con este gas, pudiendo provocar un daño grave en los tejidos o incluso la muerte. (Foto: Pixabay)

Según los especialistas, en este caso las partículas tóxicas provocadas por la combustión de las llantas permanecerán en el ambiente, al menos, por 24 horas, luego descenderán y se formará una capa de hollín en la zona.

--- Síntomas de las lesiones agudas ---

►Tos y flema
►Picazón en la garganta
►Senos paranasales irritados
►Dificultad para respirar
►Dolor en el pecho o sensación de opresión
►Dolores de cabeza
►Picazón en los ojos
►Nariz que moquea
►Si se tiene asma, éste puede empeorar

Asimismo, el humo tóxico es especialmente peligroso para las madres gestantes, ya que las células de los fetos absorben el monóxido de carbono de forma más rápida que las células sanguíneas adultas. De igual manera, los niños y adultos mayores son más vulnerables.

--- Complicaciones ---

Según el tiempo y el grado de exposición, la intoxicación con monóxido de carbono puede provocar:

►Daño cerebral permanente
►Daño al corazón, que puede provocar complicaciones cardíacas que ponen en riesgo la vida
►Muerte

---- Prevención ---

La mejor manera de prevenir lesiones por aspiración de humos tóxicos es limitar el tiempo que se está expuesto a ellos. Apenas se huele o ve humo -y se está en alto riesgo de respirarlo- lo mejor es abandonar el área.

“Debido al humo se ha dado una afectación a nivel de población y de medio ambiente. Es recomendable asear constantemente a los niños y limpiar las superficies con paños húmedos para evitar la concentración de elementos tóxicos”, detalló la doctora María Gastañaga Ruiz, especialista en salud ambiental del Instituto Nacional de Salud.

Fuente: y

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