"Blatter es el Manuel Burga de la FIFA", por Pedro Canelo

PEDRO CANELO (@jovennostalgico)

Joseph Blatter prefiere estar lejos de los periodistas. El Congreso FIFA, clausurado ayer en Sao Paulo, fue en un lugar alejado llamado Transamérica Expo Center. Este centro de convenciones está a una hora y media del local de prensa ubicado en el estadio Arena do Corinthians. Muy difícil llegar. Mientras menos reporteros, mejor. Y lo logró, todo un estratega este suizo. Su declaración de poder perpetuo no hizo mucho ruido. Los dirigentes de todo el mundo decidían que no habían límites de edad ni de mandato para la presidencia FIFA. Pocos hicieron bulla, la mayoría estaba corriendo detrás de la selección brasileña a varios kilómetros de allí.

Su modus operandis tiene lazos con las más maquiavélicas estrategias políticas. Blatter tiene rasgos de un presidente reeleccionista, de un viejo monarca, de un dictador con saco y corbata. Cuando los cables debían rebotar su proclamación de permanencia, las miradas cambiaron de dirección para enfocarse en los entrenamientos de Brasil y Croacia en el Arena do Corinthians. Blatter se podría quedar por los siglos de los siglos, pero los micrófonos estaban detrás de Neymar y Hulk.

Pude ver de lejos a Joseph Blatter en el Congreso FIFA. Siempre tiene una sonrisa nerviosa, como si supiera que en cualquier momento alguien fuera a lanzarle un insulto desde lejos. Quiere parecer amigable pero su lista roja de enemigos cada vez es más grande. En Europa quieren otro líder. El Viejo Continente prefiere un joven.

Fue difícil abordar a Blatter, a los periodistas nos ubicaron en una alejada sala de prensa mediana, donde el Internet se fue en horas del almuerzo. Solo Bruce Willis o Van Damme hubieran podido cruzar el cerco de seguridad que se armó para que no exista contacto entre dirigentes y reporteros. Eran órdenes de este hombre que personifica el perfil del dirigente eterno. A Sepp lo sientan al lado de Manuel Burga en una mesa y será muy difícil encontrar las cinco diferencias. Sus prolongadas existencias en el balompié se han repetido en todos los lugares. Un ataque de los clones del balompié: Blatter en la FIFA, Burga en la FPF, Grondona en Argentina, Leóz hasta hace poco en la Conmebol. Todos compitiendo por el más extenso de los reinados. Veinte años es nada. Un siglo es el límite.

Hoy más que nunca entiendo por qué tenemos a Manuel Burga en la Videna. Está hecho a imagen y semejanza de su jefe máximo. Joseph Blatter ayer anunció que podría irse a la reelección. No nos sorprenda que Manuel Burga haga lo mismo en octubre. Los dos te dejan una extraña sensación de peligrosa eternidad. Puedes morirte dos veces y ambos seguirán en sus sillones. Con ellos sí hay males que duran cien años.