
Cerrar las puertas al futuro
Resumen generado por Inteligencia ArtificialLa propuesta legislativa en Estados Unidos que busca restringir el acceso de estudiantes internacionales a sus universidades más prestigiosas no solo afectará a miles de jóvenes que sueñan con una educación de calidad. También pone en riesgo principios que han sostenido el avance del conocimiento, la cooperación global y el desarrollo económico basado en el mérito y la libertad.
De aprobarse, universidades como Harvard, MIT o Columbia se verían forzadas a limitar el ingreso de estudiantes extranjeros, incluso si han sido admitidos por mérito. En el caso de Harvard, más de 6.000 estudiantes internacionales cursan actualmente programas de pregrado y posgrado. Representan alrededor del 25% de su matrícula total. Esta diversidad no es casualidad: es parte esencial de su excelencia.
He tenido el privilegio de conocer de cerca a jóvenes peruanos con un talento y compromiso excepcionales. Gracias a su esfuerzo, al respaldo del Estado, la empresa privada, la filantropía de peruanos comprometidos con el país y al coraje y determinación de quienes asumieron retos financieros importantes para apostar por su educación, hoy muchos de ellos estudiaron y estudian en universidades de primer nivel. Su presencia honra no solo su mérito personal, sino también el compromiso colectivo e individual de un país que cree en el conocimiento como motor de transformación y en la educación como vía para construir un futuro mejor.
Negarles esa oportunidad sería deshacer años de inversión en capital humano. También sería cuestionar un principio esencial de la educación superior: que el talento, dondequiera que nazca, merece ser reconocido y desarrollado.
Además, medidas como esta afectan la autonomía universitaria. Las instituciones deben conservar la libertad de decidir a quién formar, con base en valores democráticos, criterios académicos y su misión institucional. La riqueza de pensamiento que se genera en espacios diversos ha sido clave para que muchas universidades se conviertan en referentes de innovación, ciencia y liderazgo.
En el contexto peruano, la Ley Universitaria 30220-2014 establece con claridad que uno de los fines de la universidad es “promover la internacionalización de la investigación, la docencia y la formación académica, mediante el intercambio, la movilidad académica y la cooperación interinstitucional”. Esta visión sigue vigente y es esencial para elevar la calidad educativa y conectar al país con los estándares globales.
Limitar el acceso a formación de excelencia reduce la competencia de ideas, restringe la creatividad y empobrece los espacios donde surgen soluciones a desafíos globales como el cambio climático, las pandemias o la inequidad.
El talento no tiene pasaporte, las fronteras no deben estar en las aulas y el conocimiento debe seguir siendo un bien que se comparte, no que se restringe. Cerrar las puertas al conocimiento es cerrar también las puertas al futuro que necesitamos construir juntos.