Eduardo Tito Calla, fiscal de Macusani, en Puno, fue expulsado de la ciudad por ronderos. Los miembros de las rondas campesinas de la provincia de Carabaya lo acusaron de haber solicitado la liberación de un presunto asesino y lo llevaron hasta las afueras de la localidad.
Ello luego de que se llevara a cabo una reunión de dirigentes de las rondas campesinas con el presidente de la Corte Superior de Justicia de Puno, Hernán Layme Yépez, y la presidenta de la Junta de Fiscales Superiores de la región, Judith Contreras Vargas.
La reunión se efectuó en el local del Ministerio Público de Macusani, fuertemente resguardada por un contingente policial ya que en el exterior medio millar de ronderos amenazaban con tomar justicia con sus propias manos en caso de que el fiscal no fuera destituido.
Según el presidente de las rondas de Carabaya, Jorge Calsina Huamani, el cuestionado fiscal habría solicitado la liberación de Florencio Chura Monroy, acusado de descuartizar a su esposa y de matar a otras 2 mujeres en complicidad con Toribio Crecente Huanca.
Chura y Crecente enfrentan procesos judiciales recluidos en la cárcel con nueve meses de prisión preventiva luego de ser capturados por las rondas campesinas y ser entregados a las autoridades en setiembre del 2015.
Los ronderos solicitaron que el fiscal sea sometido a una investigación por los órganos de control interno del Ministerio Público.
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— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) 2 de noviembre de 2016
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