
Un músico muerto en el esplendor de su juventud y la plena madurez de su talento, tras producir la obra que habría de preservarlo del olvido. He aquí, en síntesis, la dolorosa historia de George Bizet y de su ópera “Carmen”. Su estreno, el 3 de marzo de 1875, lo albergó un teatro en desgracia, la Opéra-Comique de París, que entonces arrastraba largas temporadas de fiascos escénicos. El compositor murió el 3 de junio de ese año, a los 36 años, de lo que se creyó un resfriado. Hoy se sabe que fue un infarto al miocardio.
Ese día, su obra alcanzaba su vigésima puesta en escena. La desaparición del compositor y la desafección de los parisienses por su ópera cómica hacían pensar que “Carmen” desaparecería sin pena ni gloria. Los diarios criticaban sus “actos fríos y sin movimiento”, su “acción dispersa y carente de unidad”, las “canciones españolas vacilantes y un bolero paralizado”. “La musa de Bizet parece desconcertada”, afirmaba la prensa parisina.

El estreno en el Teatro Olimpo
Sin embargo, el entusiasmo por “Carmen” en otras salas de Europa contradijo los primeros juicios parisienses. La obra empezaba a ser aclamada en Bruselas, Viena, Berlín, Londres y San Petersburgo. Los limeños debieron esperar doce años, hasta la noche del 2 de agosto de 1887, para poder asistir al estreno local de esta ópera francesa en el teatro Olimpo, (sobre el que se construiría el actual Teatro Municipal), interpretada por la Compañía Lírica Francesa.
“A los limeños, acostumbrados a la escuela italiana, su estreno tampoco gustó”. Como se advierte en el artículo publicado cuatro días después en El Comercio, la expectativa era tan alta como la polémica, pues se trataba de una producción “de la nueva escuela”, como se decía. De Bizet no se sabía entonces demasiado. El público estaba avisado de su muerte prematura, y del mediano éxito de sus óperas anteriores, siendo “Los pescadores de perlas” la de mayor predicamento entonces.
En el cartel de aquella debutante “Carmen”, lideraba el elenco Mademoiselle Narbonnet, acompañada por Mme. Vallée en el papel de Micaela, Mme. Ballande como Mercedes, Mme. Rivolta como la gitana Frasquita, Monsieur Serack como Don José, Mr. Genevois como el torero Escamillo, entre otros intérpretes galos.

“A los limeños, acostumbrados a la escuela italiana, su estreno local en 1887, tampoco gustó”.
Había entradas de todo precio: desde 10 soles de plata para los exclusivos palcos hasta 50 centavos la cazuela. “La primera impresión que produce la música de esta ópera es de sorpresa. El auditorio se espera aires españoles y se encuentra con música muy estudiada”, señala el articulista presente en el estreno local. En efecto, los limeños pensaban que escucharían música española, pero se encontraron con otra cosa.
“Nuestro público, acostumbrado a la escuela italiana y apasionado de ella, se ve perplejo y concluye por manifestarse disgustado ante esa combinación sinfónica de sonidos que no hablan directa e inmediatamente al sentimiento. Y no se crea que hemos sido la excepción: en París mismo, en 1875, ‘Carmen’ produjo impresión casi idéntica”, advierte la nota sin firma. Sin embargo, en las siguientes funciones aquella primera impresión fue cambiando. Había que acostumbrar el oído a nuevas formas de composición. “Después de haber escuchado ‘Carmen’ tres o cuatro veces, los que se disgustaron en el estreno se arrepienten y confiesan el pecado”, señala el redactor de El Comercio. “La música de ‘Carmen’ es música de estudio y de refinamiento; tan delicada como expresiva, y, según las situaciones, ligera y bulliciosa o seria y apasionada. La instrumentación es muy bien coloreada y de efectos admirables”, describe El Comercio.

“Carmen” en el Municipal
Como parte de una potente temporada lírica anual, y conmemorando los 150 años del estreno de la ópera “Carmen” y de la muerte de su compositor, Georges Bizet, el Teatro Municipal de Lima ofrecerá una nueva producción de esta icónica obra con un elenco de primeras figuras internacionales, acompañadas por la Orquesta y Coro del Teatro Municipal de Lima.
Será los días 29, 31 de agosto y 2 de setiembre. Para el papel de Carmen, está confirmada la presencia de la mezzosoprano española Silvia Tro Santafé; como Don José, el tenor Alejandro Del Ángel (Mxjico); Escamillo será el barítono Vittorio Prato (Italia); y Micaela, la soprano rusa Mira Alkhovik.
La dirección musical corre a cargo de la francesa Nathalie Marin y la dirección de escena será del peruano Jean Pierre Gamarra.