(Ilustración: Giovanni Tazza)
(Ilustración: Giovanni Tazza)
Hace 100 años

El príncipe Hirohito, heredero del trono del Japón, ha pasado una semana en Londres practicando actos que ni siquiera habría soñado jamás ninguno de sus antepasados y que hasta pocos años atrás se consideraban imposibles para un miembro de la casa imperial japonesa. El príncipe ha descendido de su tradicional estatus de semi-divinidad y se le ve estrechando las manos a muchas personas, posando ante los fotógrafos, paseando en automóvil sin escolta, visitando museos y galerías de arte junto con el público que concurre a dichos lugares. Algo inédito.

H.L.M.