Juan Saldarriaga

Los vientos de guerra provenientes de Ucrania comienzan a azotar nuestra atribulada economía, impactada previamente por la pandemia de COVID-19 y por la crisis energética mundial del 2021. El pasado 7 de marzo, mientras los misiles rusos caían sobre Kiev – capital de Ucrania – el precio del barril de petróleo en Europa (Brent) rompía la barrera de US$120 por vez primera en los últimos catorce años, colocándose por varias horas en US$123,21.