En la frontera con Chile, el personal de salud brinda material informativo a los viajeros. Por este punto, al día, transitan unos 25 mil visitantes. (Foto: Ernesto Suárez)
En la frontera con Chile, el personal de salud brinda material informativo a los viajeros. Por este punto, al día, transitan unos 25 mil visitantes. (Foto: Ernesto Suárez)
Jorge Falen

El Perú entró el último viernes en la lista de 92 naciones con presencia de casos confirmados de . Desde finales de enero, el Ministerio de Salud cuenta con un protocolo aprobado para el tratamiento de coronavirus; sin embargo, su aplicación no es óptima en todos los puntos de acceso al país. Mientras se refuerza la acción preventiva en el aeropuerto internacional Jorge Chávez y en el puerto del Callao –los dos terminales más importantes para el flujo de personas y mercancías al exterior–, la situación es distinta en las principales zonas fronterizas.

En el norte

Los casos confirmados de pacientes con coronavirus en Ecuador –que a la fecha suman 13– han alertado a las autoridades sanitarias de Tumbes, quienes en coordinación con Migraciones han instalado una posta en el Centro Binacional de Atención en Frontera (Cebaf), donde el personal realiza sus labores portando mascarillas. El mismo escenario se observa en el puente internacional del distrito fronterizo de Aguas Verdes, en Zarumilla, donde se ha instalado un centro de salud para brindar información a los viajeros.

La falta de agua en las ciudades afecta el funcionamiento de hospitales y centros médicos y representa un caldo de cultivo para otras enfermedades virales como el dengue. Frente a esto, las autoridades han decidido que se priorice el abastecimiento mediante cisternas a los 42 establecimientos médicos en la región mientras esté vigente la alarma por coronavirus.

El director regional de Salud de Tumbes, Harold Burgos Herrera, señaló que ha dispuesto armar carpas para aislamiento en las instalaciones del Hospital Regional de Tumbes –que cuenta con 120 camas y atiende a 600 pacientes diarios– y acondicionar espacios de atención en los ambientes de la Facultad de Obstetricia de la Universidad Nacional de Tumbes.

Ambos locales se sumarán a un centro comunitario para casos sospechosos que se ubicará en el asentamiento humano La Curva. Asimismo, Burgos remarcó que requieren S/1 millón para contratar más personal especializado en trabajos preventivos.

En el sur

La situación en Tacna es de alerta, dado que en Chile se han registrado tres casos de coronavirus. En el complejo fronterizo Santa Rosa –donde transitan diariamente entre 10 mil y 25 mil visitantes–, el personal de salud reparte volantes a los viajeros y recomienda a aquellos que han estado los últimos 14 días en países con casos confirmados y presenten malestar respiratorio a comunicar sus síntomas.

El director regional de Salud de Tacna, Juan Cánepa, señaló a El Comercio que, si se detectan visitantes con sintomatología grave, estos serían devueltos a Chile. “Si el paciente es grave, dependiendo del lugar de procedencia, y según lo pactado en el acuerdo binacional con Chile, tendría que regresar a su país”, indicó.

El funcionario añadió que, en caso de que se trate de pacientes peruanos, estos serán trasladados a una zona de aislamiento en el hospital Hipólito Unanue de Tacna. Pese a que hasta el momento se cuenta con solo tres enfermeras en la frontera, Cánepa espera la contratación de más personal para garantizar el chequeo de los viajeros durante las 24 horas.

En Puno, el jefe de la Unidad de Epidemiología de la Dirección Regional de Salud (Diresa), Percy Casaperalta, informó que el personal de las zonas fronterizas con Bolivia como Desaguadero, Yunguyo y Tilali es capacitado para la atención de posibles infectados. Sin embargo, la falta de presupuesto aún impide la instalación de zonas de aislamiento.

“Estamos preparándonos, no contamos con nada, no tenemos infraestructura. El único nosocomio nuevo está en Macusani (Carabaya), pero no tiene la capacidad resolutiva por falta de personal especializado”, indica.

Agrega que los hospitales Carlos Monge Medrano de Juliaca y Manuel Núñez Butrón de Puno son los únicos preparados en la región para afrontar situaciones como el coronavirus. Sin embargo, estos no cuentan con los materiales de protección necesarios.

Riesgo en la selva

La prevención ante el coronavirus pondrá a prueba a los servicios sanitarios de Loreto y Madre de Dios, que comparten frontera con Brasil (donde existen 17 casos confirmados). Ambas regiones atienden una gran cantidad de casos diarios de infectados por dengue, la otra epidemia que avanza a paso acelerado. En lo que va del año, esa enfermedad ha dejado 22 fallecidos y más de 5.800 casos confirmados, de los cuales más del 50% se concentra en ambas regiones.

La Dirección Regional de Salud de Loreto contará con 10 puntos de atención en zonas fronterizas para pacientes con síntomas de coronavirus. “Tenemos el plan de contingencia nacional que ha sido coordinado con el Ministerio de Salud para recibir información de personas con nivel de sospecha o exposición que sean identificadas con coronavirus”, precisa la entidad.

Los posibles casos serán trasladados al hospital regional Felipe Arriola Iglesias, que cuenta con 40 camas de aislamiento. “En caso de coronavirus, en esta área concentraríamos todo el trabajo por un tema de referencia y logística. Asimismo, el paciente puede ser trasladado a Lima, en caso de que se necesite un tratamiento de mayor complejidad”, comenta.

Transmisión

Carlos Medina, médico infectólogo de la Universidad Cayetano Heredia, señala que en este momento la transmisión del coronavirus en zonas de frontera es poco probable porque trasladan menos personas que el aeropuerto de Lima, pero podría presentarse si se consolidan los casos confirmados en países vecinos. “En este momento no se ha demostrado transmisión comunitaria en ninguno de los países con los que tenemos fronteras, todos tienen casos importados”, dice.

El especialista remarca que solo el 20% de los casos confirmados presenta complicaciones, usualmente en adultos mayores, por lo que es importante fomentar la prevención a través de vacunas como la del neumococo.

“[El coronavirus] es una infección respiratoria de las tantas que tenemos. En realidad, posiblemente no tenga tanta severidad como enfermedad, pero sí es una oportunidad para poder ajustar medidas de higiene básica que debemos adoptar”, indica.

Síguenos en Twitter como

Contenido sugerido

Contenido GEC