Miles de devotos del Señor Cautivo de Ayabaca demuestran por estos días en la provincia del mismo nombre, en la sierra de Piura, la fe hacia el Cristo, por el que muchos han hecho peregrinación por largos tramos, incluso de rodillas o arrastrándose.
Estos actos de penitencia suelen verse cada año. Justamente hoy es el día central de la festividad religiosa, la más grande de la región Piura.
Los ayabaquinos y devotos que llegan desde distintas partes del Perú y del extranjero participan de las misas y la multitudinaria procesión luego de la saluda de la imagen del Señor Cautivo de Ayabaca, que se guarda en el santuario del mismo nombre, a 2.715 metros sobre el nivel del mar.
Esta estructura ubicada en la plaza de armas de Ayabaca data del siglo XVII, anteriormente era conocida como Nuestra Señora del Pilar.