
Ante la creciente ola de inseguridad ciudadana que afecta al país, las cajas fuertes han comenzado a llamar la atención de los ciudadanos. El Comercio conversó con fabricantes de estos artículos para conocer más sobre el desarrollo de un producto cuyo objetivo es evitar el robo de objetos de valor, tanto en hogares como en hoteles, vehículos, centros de trabajo, entre otros.
Luis Alberto Pérez, gerente de producción de la empresa fabricante de cajas fuertes Tecsicap, dijo a El Comercio que existen dos formas de fabricar cajas fuertes. En primer lugar, están aquellas hechas a base de cemento, lo que permite que, si un ladrón intenta abrirla con un soplete de fuego, no pueda lograr su objetivo. En segundo lugar, están las cajas fuertes metálicas, que están hechas completamente de metal y cuentan con una plancha más gruesa. “Con ‘plancha’ nos referimos a la estructura que constituye el cuerpo de las cajas”, explicó.

“Nosotros trabajamos en nuestros talleres electrónicos y de soldadura, donde soldamos el metal y el cemento. Contamos con equipos de dobladoras de planchas y otras herramientas necesarias. Como mencioné, los materiales principales de las cajas fuertes son el cemento y el metal", agregó.
El experto indicó que el tiempo de fabricación depende del tamaño del producto. “Una caja fuerte pequeña, de 40 cm de ancho, 40 cm de alto y 40 cm de fondo, puede tardar un día en fabricarse. Mientras que una caja fuerte más grande, de 1 metro 80 cm de alto, 1 metro de ancho y 1 metro de fondo, puede tardar alrededor de 6 días”, detalló.

Luis mencionó que el año pasado las ventas de cajas fuertes aumentaron debido a la creciente inseguridad ciudadana en Perú. “Además, la gente ha perdido confianza en las plataformas digitales, especialmente después del caso de filtración de datos de una entidad bancaria. Por eso, muchas personas actualmente optan por nuestros servicios. Nosotros trabajamos 12 horas al día, de lunes a sábado, y aproximadamente cada hora recibimos 10 llamadas de personas interesadas en nuestras cotizaciones”, comentó.

"Ahora la gente pide más cajas fuertes. Además, hemos mejorado nuestros modelos. Por ejemplo, ya no solo ofrecemos cajas fuertes con claves digitales y mecánicas, sino también con huella digital“, concluyó.
Por otro lado, Jimmy Saavedra, técnico de cajas fuertes de la empresa Indutec, reveló a este diario que lo primero que se hace al fabricar este producto es tomar las medidas requeridas por el cliente. “No hay una medida específica para las cajas fuertes, ya que algunos clientes tienen un espacio definido, aunque sí existen modelos estándar. Después de tomar las medidas, plegamos una plancha de acero y realizamos los dobleces mediante soldadura. Una vez armada la estructura, se envía al área de pintura para su acabado final, donde se coloca la cerradura, bisagras, mecanismo interno y otros accesorios”, explicó.

El experto agregó que el material principal utilizado es una plancha de metal laminado con pequeñas partículas de acero. “Las cajas fuertes más pequeñas que fabricamos tienen dimensiones de 30 cm de alto, 35 cm de ancho y 25 cm de fondo, ideales para oficinas, hogares y negocios. Estas pueden tardar entre 3 y 4 días en fabricarse. Por otro lado, nuestras cajas más grandes, que miden 1 metro 80 cm de alto, 83 cm de ancho y 80 cm de fondo, son usualmente destinadas a bancos, joyerías y otras entidades. Estas pueden demorar entre 15 días y un mes”, añadió.
"Actualmente hay más pedidos de este producto. La demanda es especialmente fuerte en provincias, sobre todo en la selva y en el sector minero. También hemos notado una tendencia a adquirir cajas fuertes en ciudades como Juliaca, Puerto Maldonado, Huancayo, Pucallpa, Tarapoto y Trujillo. Esto se debe a la creciente inseguridad ciudadana. Además, ahora contamos con más novedades. Antes, lo más innovador era el teclado digital como contraseña, pero ahora ofrecemos sistemas de reconocimiento facial y Bluetooth, todo a precios más accesibles“, concluyó.

Panorama del robo de viviendas en Lima
Para el año 2021, el 7,3% de viviendas de Lima Metropolitana y Callao fue víctima de robo o intento de robo, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Para el 2023 el porcentaje subió a 11,6%.
A nivel nacional, en el primer semestre del 2024, INEI reporta que el 12,3% de las viviendas en el área urbana a nivel nacional fueron afectadas por robo o intento de robo. En este periodo, el porcentaje en Lima fue de 9,7% y del Callao 9,4%.
En un informe previo de este Diario se reveló que de 964 denuncias por robo de viviendas en Lima Metropolitana entre enero y agosto del 2024, el distrito con más casos era Santiago de Surco con 129 denuncias. San Juan de Lurigancho ocupa el segundo puesto con 72 denuncias, seguido por Los Olivos (67), Lima (62) y San Borja (55).

Una de las modalidades más comunes que emplean los delincuentes para ingresar a las viviendas consiste en llegar hasta la puerta de una casa y tocar repetidamente hasta confirmar que no hay nadie en su interior. Una vez confirmada la ausencia, llegan sus cómplices. Según la policía, suele ser una mujer quien realiza este primer contacto, con el fin de pasar desapercibida ante cualquier sospecha que pudieran tener los vecinos.
Con la certeza de que la casa está vacía, los delincuentes proceden a violentar la puerta con herramientas, generalmente una palanca conocida como ‘pata de cabra’. Una vez dentro, se llevan todo lo que tiene valor y que pueda ser fácilmente revendido.

Otra modalidad utilizada por los delincuentes para ingresar a las viviendas es hacerse pasar por vendedores de paquetes de internet o telefonía. En estos casos, buscan viviendas donde haya personas mayores a quienes puedan engañar. En algunas ocasiones, incluso se presentan uniformados para evitar levantar sospechas.
César Ortiz Anderson, presidente de la Asociación Pro Seguridad Ciudadana (Aprosec), alertó que actualmente se podría deducir que hay más robos a viviendas en San Juan de Lurigancho por la gran cantidad de comerciantes que residen en el distrito. Indicó que algunos optan por guardar ahorros en efectivo en sus casas y eso es buscado por los delincuentes.