¿Sabías que el Perú es el país con mayor radiación solar a nivel global seguido por Bolivia, Argentina y Chile? Hacia finales de diciembre, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) advirtió que el Perú está alcanzando categorías de exposición de radiación ultravioleta entre ‘alta’ y ‘extremadamente alta’.
“En la costa los valores del índice UV (IUV) vienen oscilando entre 7 y 14 aproximadamente. En la sierra dichos valores fluctúan entre 8 y 18. Finalmente, en la región de la selva los IUV registran valores entre 8 y 15. Todos los valores antes mencionados están consideradas entre ‘alta’ y ‘extremadamente alta’”, detallaron en un comunicado.
Para el 3 de enero de 2024, el pronóstico de radiación UV máximo a nivel nacional marcaba los siguientes patrones, según Senamhi.
¿Pero qué significan realmente estas cifras?
“La radiación es una propiedad intrínseca que tiene el planeta respecto al Sol. Este Sol es la fuente de vida y energía que se traslada de una u otra manera a la Tierra en forma de ondas, las cuales son atenuadas por los diferentes tipos de atmósferas que tiene el planeta como la mesosfora, estratosfera, etc. Esta radiación va a impactar en la superficie y va a rebotar nuevamente hacia el espacio exterior, pasando nuevamente por estas capas”, nos explica Fernando Neyra, docente de la carrera de Ingeniería Ambiental de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) en entrevista con El Comercio.
Neyra explica que si bien el ser humano y los animales estamos adaptados a este tipo de radiación solar, el exponerse demasiado a ella puede generar algún un tipo de impacto. Hay que tener en cuenta también que en el caso del Perú, debido a su cercanía a la zona ecuatorial, los rayos del sol impactan casi en 90 grados. La cercanía al Ecuador, implica también que el nivel de radiación en nuestro país sea alta durante todo el año.
Adaptados pero sin cultura de prevención
Uno de los grandes problemas que vivimos actualmente en el Perú, es que ante la amenaza del cambio climático no hay una cultura de prevención propiamente dicha. En ese sentido, la contaminación ambiental crece día a día sin reparo ni cuidado por lo que esta pueda afectarnos en el largo plazo.
“Cuando rebotan estas ondas infrarrojas deberían salir al espacio pero qué pasa. Como todos los días usamos autos, encendemos un motor, generamos emulsión, que hace su efecto invernadero y por lo tanto ese calor, esa radiación no sale y se incrementa. ¿Y dónde se incrementa? en ciudades con alto grado de contaminación como Lima”, señala el especialista.
”Ahora mismo, cuántos autos están están estacionados, prendiendo el motor y con el aire acondicionado prendido sin saber cómo pueden afectar a los que están respirando alrededor. Eso eleva el nivel de contaminación, por eso es importante que el Estado impulse a las empresas a que cambie su matriz energética porque no puede ser posible que en pleno 2024, todavía tengamos autos o mototaxis a petróleo, botando tanto humo”, agrega.
¿Qué consecuencias existen?
Hay que tener claro, entonces, que estamos expuestos a la radiación solar durante todo el año, por tanto, no es un problema que solo nos pueda afectar en verano.
“La radiación se da en cualquier momento, con sol o sin sol aparente y por tanto si la exposición ha sido prolongada y sin protección a los rayos UV puede causar daño a la piel incluyendo quemaduras, envejecimiento prematuro, manchas, arrugas y aumento de riesgo de cáncer en la piel. Está también la presencia de manchas negras, ampollas, etc.”.
En esa misma línea, Ana Ramos, Directora Médica de Pacífico Salud, nos explica que así como hay casos extremos en donde la piel está tan roja por la quemadura del sol, están también quienes se exponen permanentemente a la radiación solar sin llegar a “quemarse”. “la piel de estos pacientes se destruye también, se envejece. Es cuando estamos hablando de un envejecimiento prematuro donde también tendremos presencia de pecas, verrugas, manchas”.
Algo que muchas veces no se tiene en cuenta cuando se habla de los daños de la radiación solar es el cuidado que debe tener, además de la piel, nuestros ojos. “los rayos solares, ya sea cuando estamos caminando o bronceándonos en la playa, afecta también a nuestros ojos. Por eso es bueno usar un buen anteojo de sol, de lo contrario, podríamos presentar carnosidades, daños en la conjuntiva, en la córnea, en la retina”, apunta la doctora.
¿Cómo cuidarnos?
En palabras de Ana Ramos, el primer paso para cuidarnos de la radiación solar es ser consciente de los daños que nos puede traer una exposición solar si es que tomamos precauciones. “Debemos adoptar la rutina del bloqueador. Este debe ser como el jabón que usamos a diario para bañarnos o lavarnos, es decir, usarlo de forma permanente y no solo cuando vamos a la playa. Otro elemento que nos puede ayudar también es usar un gorro, una visera. En cuanto al horario, hay que evitar exponernos al sol entre las 11:00 a.m. y 3:00 p.m.”.
Si es que estamos en la playa, en el caso de los niños, es importante cubrirles toda la piel con este tipo de traje de baño largo, ya que ellos tienen la piel más sensible.
¿Qué distritos de Lima son los más afectados por la radiación?
Como si de un abrigo se tratase, las nubes nos protegen de los rayos UV del sol. “Cuando hay nubes, no hay humedad, por tanto hay mayor exposición del sol”, explica Fernando Neyra, quien agrega que por este fenómeno, los distritos más alejados del borde costero, como La Molina, Ate Vitarte, Chosica o San Juan de Lurigancho son aquellos más propensos a la radiación solar. De lo contrario, aquellos que están más cerca del mar, son los que menos riesgo pueden tener.
A nivel nacional, en la sierra, por ejemplo, Cusco, Arequipa, Huancayo, son algunos de los departamentos más expuestos al sol debido a su clima seco.
Esto, sin embargo, es relativo ya que cuando el sol aparece siempre genera riesgos si es que no tomamos las precauciones debidas.
Sobre el uso del bloqueador
En febrero de 2023, la Oficina de Inteligencia e Información Sanitaria de EsSalud, informó que el cáncer de piel ocupaba el tercer lugar entre seis tipos distintos de cáncer.
El cáncer de mama ocupaba el primer lugar, seguido del cáncer de próstata, de pie, cuello uterino, de estómago y de pulmón. Por eso es tan importante adaptar a nuestra vida una cultura de prevención y para esto es importante el buen uso del bloqueador solar.
Cabe destacar que la luz del sol llega hasta nosotros en forma de rayos llamados ultravioleta. Estos rayos son buenos porque nos permiten de cierta manera metabolizar la vitamina D pero cuando pasa el tiempo prudencial que es de 30 minutos, y seguimos expuestos a esta luz solar, ya puede hacernos daño. No solo nos maltrata, nos envejece, como han explicado Neyra y Ramos sino que también nos quema. Por eso es importante protegernos de una exposición prolongada al sol.
“Para comprar un bloqueador, hay que tener en cuenta que en el empaque del producto diga que este te protege de los rayos ultravioleta B (UVB) que es el más dañino. Sin embargo el ultravioleta A (UVA) también nos puede hacer daño. Entonces, cuando compramos un bloqueador tenemos que leer bien y saber que este nos puede proteger de los dos tipos de rayos ultravioleta y de alto espectro”, explica Ramos.
“Otro dato importante es saber qué significa el factor de protección solar (FPS). Vemos que existen de 30, 50,, 80 y hasta 100 y creemos que mientras más alto el número es mejor pero no es así. Lo recomendable es un factor de protección de 30 a 50. Con eso ya se protege la piel frente a estos rayos ultravioleta más o menos en un 99%. Agregarle más números al factor solo te va a sumar una protección de 1 o 2%, así que no es necesario”, añade la especialista.
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