
Por: Nora Sugobono, desde Milán
El taxi se detuvo cerca a la puerta del señorial Palazzo Serbelloni (una casona de estilo neoclásico, a unos diez minutos del famosísimo Duomo de Milano) pero el conductor no entendía bien qué estaba pasando en la calle. Al menos un centenar de personas -celulares en mano, gritos y vítores a todo volumen- esperaban a Jorge Luis Salinas, cuyo desfile estaba programado para las 2:30 p.m. de ayer domingo, día de cierre de la Semana de la moda de Milán. Con las manos arriba, una mujer sostenía una bandera peruana en lo alto.
Antes de empezar con el show –cuya capacidad era limitada- el diseñador decidió salir a saludar y compartir unas palabras. “Las historias del Perú a través de la moda están aquí. Estoy orgulloso de que estén hoy. Estoy orgulloso de nuestro país”, dijo Salinas rodeado de gente. Milán alberga la comunidad de peruanos más grande de Italia y una de las más numerosas de Europa; de ahí que para muchos haya sido tan importante la presencia de este talento local, cuya carrera está haciendo historia. Algunos de ellos habían dejado de ir a trabajar por verlo, otros esperaron varias horas afuera para volver a saludarlo al final. La emoción era palpable, y no es para menos. La sensación para nuestros compatriotas era comparable a lo que vivieron cuando Juan Diego Flórez se presentó en el Teatro de la Scalla, sin ir muy lejos. Una representación necesaria, que llena de orgullo a un país entero, dentro y fuera de sus fronteras.
Milán, cuna de la alta costura italiana y una de las grandes capitales de la moda mundial, recibió al talento peruano con los brazos abiertos. Si bien este es su tercer desfile en la ciudad italiana, “Sipán” es su primera colección presentada dentro del circuito oficial de la Semana de la Moda. Es decir, J. Salinas (así se titula su marca oficial) compartió espacio con Armani, Gucci o Prada, en un evento sin precedentes. Fashionistas, influencers y medios de distintos países estuvieron presentes en el exclusivo encuentro, coronado con la presencia de la periodista italiana Anna Dello Russo, una eminencia en la moda internacional. Dello Russo, vestida con un abrigo de alpaca en tono oro con el sello de J. Salinas, conversó en exclusiva con El Comercio sobre este hito.
“El diseño es impresionante y el trabajo artesanal es muy importante, porque te abre una ventana. Para mí, promover el país (Perú) tiene que ver con la gente que está detrás de la moda también, como los artesanos. La calidad de estos materiales, como la alpaca, es maravillosa. Aquí se combina la calidad, la mano de obra, y lo preciado de este trabajo”, indicó sobre la colección firmada por Salinas. Personalidades como Alondra García Miró, Magaly Medina y Natalie Vértiz -quien abrió el show en la pasarela- tampoco se perdieron de esta cita.

En total se mostraron en pasarela 39 tenidas creadas por Jorge Luis en su taller de Gamarra. Muchas de ellas elaboradas durante meses por un grupo de tejedoras, comandadas por el diseñador, con piezas únicas que aún no estarán a la venta. Tras un casting realizado en Milán los días previos -por donde pasaron al menos 800 modelos- y un año de trabajo dedicado a “Sipán”, Jorge Luis por fin pudo cumplir un sueño más de su impresionante lista de logros. Su desfile, dedicado a sus padres, es un orgullo compartido por todos sus compatriotas. El comienzo de un nuevo camino que no ha hecho más que empezar.